Inseparables /30 days OTP/ [Goldfred] #FNAFHS

Day 7

Gold no podía creer cómo había terminado en aquella situación.

Hace un par de horas estaba disfrutando de un relajante fin de semana después de una ajetreada jornada de trabajo. 

Era sábado en la mañana y un radiante sol se asomaba por los ventanales de la mansión Golden. Un día tan bello no iba a ser desaprovechado por el cenizo, el cual decidió pasar el resto del día gozando de un día de lectura al aire libre, rodeado de los bellos rosedales de su hogar.

Todo iba de acuerdo a su plan, hasta que notó cómo de repente su vista se oscurecía y una profunda voz ronca hablaba.

— Adivina, ¿quién soy?

El mayor decidió seguir el juego.

— ¿Puede ser que sea el oso de mi vida?

El azabache sonrió y quitó sus manos del aporcelanado rostro de su novio para lanzarse en un necesitado abrazo. No había podido ver a Gold toda la semana debido al trabajo tan exigente del mayor.

— Te extrañé mucho y quise venir de sorpresa — dijo el menor, extendiéndole una pequeña caja de bombones. — También intenté hacerte una sorpresa, espero que te guste.

Gold correspondió tiernamente el abrazo y tomó con cuidado el pequeño obsequio que su pareja le trajo. De repente, cayó en cuenta de lo que estaba pasando. Su cerebro hizo click.

— Fred, es mejor que hables ahora.

El ojigris sabía muy bien que Fred era demasiado flojo para tomarse el tiempo de hacerle una sorpresa manual, en especial si se trataba de cocina, pero cuando estos presentes aparecían por casualidad, también aparecían intenciones ocultas.

— Está bien, pero dime que aceptarás — el menor hizo un puchero.

— Sin manipulaciones, oso, al grano — Gold se quitó a Fred de encima con cuidado.

— Bien, Freddy-

— Y ahora debemos presentarnos en el evento friki de esta tarde, ¿verdad? — interrumpió el cenizo.

— ¿Cómo-?

— Golden no paró de hablar de ello toda la semana. Al parecer ambos se inscribieron en un concurso de cosplay o algo por el estilo.

— Sí, bueno, no fueron los únicos — susurró en azabache.

— ¿Dijiste algo? — el menor se quedó en silencio. — Bueno, entiendo que hayas sido precavido, mi amor, sabes que necesitaba este día para relajarme y desestresarme, pero no veo problema alguno en ir al evento. Supongo que será divertido — animó.

— Gold.

— ¿Qué sucede, pequeño? Tranquilo, no estoy enojado — le dio un cálido beso en la mejilla.

— Perdí una apuesta.

...

Y ahora se encontraba en el escenario, con un traje de 'Silver The Hedgehog', al lado de Fred, quien estaba caracterizado de 'Shadow The Hedgehog'.

Definitivamente esto no estaba en sus planes de un fin de semana desestresante. Al contrario, tenía a un montón de adolescentes gritando por lo adorables que se veían ambos y proclamándolos ganadores del concurso de cosplays, acción que lo aturdía y agobiaba un poco.

— Recuérdame, ¿por qué accedí a esta humillación?

— Porque me quieres y mi felicidad y bienestar son tu prioridad — dijo Fred orgulloso.

El mayor reconoció que era cierto, no habría problema alguno si tuviese que bajar la luna, el sol y las estrellas con tal de ver a su pequeño osito con una sonrisa en la cara. Sin embargo, con esta ocasión, quizás replantee sus prioridades más tarde, por el momento, se dedicaría a ser cómplice de los deseos de su pequeño novio.

— Bien, pero me las pagarás más tarde. Esos bombones no fueron suficientes.