Su padre ya no estaba vivo.
Fue ejecutado por la Marina antes de que pudiera ver el nacimiento de su hijo.
Lo único que dejó atrás fue a una mujer que se convertiría en madre y al bebé que llevaba dentro.
El nombre del padre se mantuvo en secreto.
L...
Un capitán es como el sol, que brilla para iluminar las aguas oscuras.
Siempre se puede ver al capitán en el centro de una multitud, una persona que instintivamente une a personas de diferentes hogares y crianzas y personalidades y formas de pensar. Nadie que no sea amado y apreciado por los demás de esta manera puede ser capitán.
Y Ace estaba destinado a ser capitán.
Tenía algo que atraía a la gente hacia él. Algo especial que iba más allá de conceptos simples como el carisma y el heroísmo. Era este respeto instantáneo y cariño por Ace lo que impulsaba a la gente a unirse a los Piratas Pica.
Los piratas son forajidos casi por definición, y la gente que terminaba en los Piratas Picas eran forajidos entre forajidos, aquellos que no tenían espacio en otras tripulaciones, o gente con antecedentes extraños que nunca se habrían convertido en piratas de otro modo. Incluso parecía tener un extraño poder del destino, obligando sin esfuerzo a esas personas a cruzarse en nuestro camino mientras viajábamos, sin tener que buscarlos.
Así, a medida que viajábamos por el Grand Line, nuestros camaradas crecían de uno en uno alrededor de Ace, y nuestra nave creció también.
Entonces, un día...
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"¡Gaaa ja ja ja! ¡Ace! ¡Te amo, hombre!"
Un hombre sudoroso y barbudo blandió un alfanje en la cubierta.
"¡Cierra tu asquerosa boca!" Le dije, dándole una patada en la cara. Salió volando del barco.
"¡M-mi recompensaaaaaaa!" El hombre chilló mientras caía en picado al mar. Aquel no era uno de los forajidos que acudían a Ace por respeto. Era el tipo de forajido que venía por motivos hostiles: un enemigo.
Ace era conocido por ser ahora el capitán de los Piratas Pica, y tenía una considerable recompensa por su cabeza. Tener una recompensa naturalmente significaba un interés no deseado por parte de la gente con la que te encuentras, y un grupo de ellos estaba atacando el barco ese día.
Junto a nuestro barco estaba la nave de los caza-recompensas. Saltaron a nuestra cubierta, rugiendo y con las armas en alto, uno tras otro. Eran muchos, muchos más que nosotros. ¿Quiénes eran los verdaderos saqueadores?
En un abrir y cerrar de ojos, la cubierta de los Piratas Pica se convirtió en un campo de batalla.
El objetivo de los merodeadores era Ace, y al instante se vio rodeado por los caza-recompensas y oculto a la vista. Me empujaron hacia un lado de la cubierta, donde muchos de nuestros compañeros estaban aislados y superados en número.
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