Bien, puede que no se me haya entendido ni mierda pero mejor lo explico más claro. (Ahora que ya me calmé)
Estaba caminando por el hotel ese, estaba más grande... Y con mejor gusto. Traté de pasar desapercibido de cualquiera pero cometí el error de no observar a más detalle el dicho hotel. Carajo. Caminé hacia el hotel y decidí ir al lado derecho de este, que lastima que ahí se encontraba la torre de Alastor. Justo cuando me escondí por ahí, que por cierto, me había arrodillado para evitar ser visto por las ventanas, sentí la presencia de Alastor. Mi corazón se aceleró a mil por segundo, una sensación jodidamente hermosa. Pero lo que menos me esperaba pasó. Alastor apareció enfrente de mí, primero de formó su sombra y luego se materializó su cuerpo. Mierda, obviamente que me asusté, pero como leí por ahí... "Sustos que dan gusto."
-Qué quieres, Vox- Apenas habló cuando mi pantalla comenzaba a ponerse roja, acompañada con algunos glitches.
-Nada- Respondí, lastima que no puedo esconder mi nerviosismo y hablé de una manera algo tonta.
-¿Qué haces por acá?- Preguntó estudiandome con la mirada.
-Y-yo...- En ese momento logré procesar todo y rápidamente me levanté para tratar de conservar mi compostura.
-Vete de aquí antes de que me arrepienta de solo haberte hablado y no haberte borrado de la existencia- Respondió severamente, a lo que yo no dudé y me encaminé de regreso. No quería quedar humillado, o por lo menos no quería que Alastor notará que estaba empezando a desarrollar CIERTO sentimiento hacia él.
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¡HOLI! Sí, otra vez yo.
Quería venir a dejarles una aclaración, esto más que ser un diario busca entrar en los recuerdos y narrar como si fuera en ese preciso momento. Más o menos como en carne y hueso, (Por así decirlo).
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El Diario De Vox
RandomVeamos que puede esconder un ser demoníaco en su diario personal.