"F" for kissing - km au

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La mirada que le daba el hombre frente a él empezaba a inquietarlo, aunque había un atril entre ambos, su cuerpo tenso y tembloroso casi parecía sentir aquellos ojos como un toque físico en su piel. Sus labios hormigueando como si recordaran el tacto de los ajenos.

—Señor Park, espero disculpe que le quite su tiempo después de mi horario de clase-...

—No hay problema, profesor.

—Pero, lo que tengo que hablar con usted es importante y que tuvo lugar fuera de nuestras obligaciones institucionales.

Jeon continuó hablando con el ceño un poco fruncido y Jimin quiso golpearse la boca por haberlo interrumpido por su necesidad de cambiar el rumbo de sus propios pensamientos.

El salón estaba vacío, apenas se podían escuchar voces desde el exterior, tal vez el ruido debió calmar sus nervios pero definitivamente estaba teniendo el efecto contrario. Siquiera pensar en tener que hablar con su profesor sobre... el beso que le dió y que algún curioso llegará a escucharlo, era perturbador.

—Repito, esta conversación se basará en algo que ocurrió fuera de estos planteles pero contrario a lo que a mi me gustaría, si ha afectado en parte de mi día a día —Jeon apoyó sus brazos en el atril frente a él haciendo que su cuerpo estuviera inclinado hacía delante. Más cerca de Jimin. Parecía un león esperando que su presa se descuidara para atacar —. Dígame señor Park o Jimin, ¿puedo llamarte Jimin?

Jimin tuvo que aclarar su garganta. La parte trasera de su cuello perlandose de sudor.

—Si, señor.

—Jungkook, solo Jungkook está bien fuera del horario de clase —
el profesor sonrió tan levemente que Jimin pensó que lo había imaginado —. Entonces, Jimin ¿notaste algo extraño o diferente en la clase de hoy?

Jimin no se esperaba esa pregunta, tampoco sabía cómo responder sin decir algo equivocado o que hiciera enojar -más- a su profesor.

—Tranquilo, puedes responder con total honestidad, estoy seguro que las cosas que pasan por mi mente son peores que las que tu puedas decir.

Jimin lo miró durante unos segundos esperando encontrar alguna trampa en las palabras del hombre frente a él pero no había nada. Los ojos de Jeon no demostraban nada y eso lo ponía nervioso pero no inseguro.

—Se equivocó... —aclaró su garganta y relamió sus labios —. Se equivocó en varios datos teóricos, confundió las partituras de la guitarra con las del piano.

El profesor tarareo de acuerdo.

—Correcto, esos fueron mis errores más notables el día de hoy —Jeon golpeteo con sus dedos la madera del atril, sus ojos sin dejar de mirar a Jimin —. ¿Considera que son recurrentes estos errores en mí?

Jimin pensó su respuesta bajo la atenta mirada del profesor en él. Sus manos empezaban a humedecerse también.

—No, creo que es la primera vez que le sucede algo como lo de hoy.

Jeon asintió, nuevamente de acuerdo con la respuesta de su alumno. Su cuerpo moviéndose un paso hacía atrás alejándose del mueble antes de rodearlo para quedar cara a cara con Jimin, sin nada en medio de ellos. El aire parecía más difícil de respirar ahora.

—Tienes toda la razón, Jimin. Es la primera vez que me ocurre algo así —Jeon se movió un paso más cerca—. Y todo eso... es culpa tuya.

Jimin casi se ahoga con su propia respiración. Sus ojos ampliándose por el asombro sin saber qué responder. Él esperaba que su profesor dijera cualquier cosa menos aquello. Los nervios haciendo ebullición en su interior.

Jeon se acercó un último paso más. Los pechos de ambos casi rozandose.

—Si, culpa suya —volvió a afirmar el mayor. Sus ojos estudiando cada parte del rostro sonrojado y lleno de confusión de Jimin —. Porque usted me desconcentra... Cada vez que lo veo, el recuerdo del tacto de sus labios en los míos parece revivir, pero cuando está fuera de mi vista pienso tanto en ello que en mi cabeza no queda espacio para nada más. Deseando... repetirlo. ¿Le parece una buena razón para todas mis equivocaciones hoy?

A Jimin le empezaban a temblar las piernas al igual que su conciencia.

Jodida mierda.