Permanente-3-

64 42 1
                                    


Al día siguiente me asignaron una tarea: ayudar a despejar la alambrada. Se empezaban a acumular caminantes y en cualquier momento podía vencer. Glenn, Carl y yo disparábamos a una velocidad sorprendente pero no fue suficiente, no paraban de llegar por todas partes. Tuvimos que pedir refuerzos. Enseguida llegó Rick con un rifle y no dudo ni dos segundos en empezar a fusilarlos. Maggie hizo lo mismo desde una de las torres de vigilancia. Glenn y Carl terminaron con los pocos que quedaban, Rick y yo acompañamos a Daryl a por troncos, troncos que mas tarde utilizaríamos para reforzar el cercado. Montamos en una especie de camión. Daryl condujo hasta un frondoso bosque bastante alejado de la prisión. No había casi caminantes, cosa que agradecía. A lo lejos pude diferenciar un pequeño pueblo.

-Ey, mirar-dije señalando mi descubrimiento. Podríamos ver si esta habitado y dependiendo de la cantidad de gente decidir si lo saqueamos o no.

-Estamos bien de provisiones no creo que sea necesario-contesto Rick

-Esta bien-dije un poco decepcionada.

Seguimos cortando troncos y almacenándolos uno encima de otro en el camión. De repente Daryl me agarró del brazo y me apartó un momento.

-Me gusta tu forma de pensar, eres una chica inteligente e iniciativa. Nos llevaremos bien ya verás-dijo Daryl. Era la primera vez que me hablaba Daryl en el tiempo que llevaba con ellos y no esperaba para nada esas palabras.

-Gracias...-fue lo único que alcancé a decir. Le sonreí, no quería parecer borde después de lo que me había dicho. El me devolvió la sonrisa y volvió al trabajo.

Estuvimos un largo rato trabajando, yo ya había perdido la noción del tiempo. ¿Qué llevaríamos un par de horas? Estaba fatigada. Me encontraba sentada en el césped apoyada contra el tronco de un árbol. Mis ojos estaban cerrados disfrutando del silencio. Si mantenía mis ojos cerrados por mas tiempo acabaría durmiendo. La voz de Rick nombrándome hizo que me asustara.

-Eh?-dije con voz de dormida

-Ayer dijiste que te quedarías una noche y que luego decidirías si marchar o quedarte. Has decidido ya que vas a hacer?-preguntó Rick

-Hace falta que responda? Obviamente me iré el grupo es un asco y me caen todos mal-bromeé riendo e hice el amago de marchar.

Rick no paraba de reír. Daryl disimulaba la risa con el ruido del hacha impactando contra el árbol.

-Me alegro de que te quedes Grace-anuncio Rick inmediatamente. Yo le sonreí.

-Ya se nos ha hecho un poco tarde Rick será mejor volver y ya festejaremos allí que Grace es un miembro permanente-dijo Daryl.


------------------------------------------------------------

Estábamos cenando todos juntos cuando Rick se subió en una silla. Iba a anunciar algo.

-Hoy estamos aquí reunidos...-Rick fue interrumpido.

-Papá para no hables así que parece un funeral-dijo Carl. Todos echaron a reir.

-Bueno, el caso es que Grace es ahora en adelante uno de los nuestros .-dijo satisfecho. Todos empezaron a aplaudir.

Continuamos cenando tranquilamente cuando Carl me dirigió la palabra.

-Oye, Grace, ¿te vas a comer eso?-me dijo haciendo pucheros.

-No, toma-dije ofreciéndoselo.

Carl lo acepto y me lo agradeció con una bonita y tierna sonrisa.

¿Bonita sonrisa?¿Grace estas enferma?¿Qué me esta pasando?-todas esas preguntas pasaron por mi cabeza en aquel instante.


Narra Carl:

Papa estaba anunciando la decisión que Grace había tomado. Estaba tan nervioso que lo interrumpí haciéndome el gracioso. Realmente lo hacía porque prefería no saber si se iba o se quedaba. Mi padre continuó hablando, para decir que se quedaba permanentemente. Una sensación de alegría recorrió todo mi cuerpo. Una vez que esa inquietud salió de mi cuerpo seguí cenando. Quería entablar una conversación con ella pero mis nervios me lo impedían. Lo único que pude alcanzar a decir fue una triste frase.

-Oye, Grace, ¿te vas a comer eso?

Aparte de quedar como un gordo le había hecho pucheros. ¿En que estaba pensando?



Todo ocurre por alguna razónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora