Telescopios y Ocultaciones

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4 de noviembre de 1976 22:21 horas Hogwarts

El choque de una docena de telescopios de latón y vidrios rotos contra la piedra rompió el pacífico silencio de la Torre de Astronomía que antes solo había sido roto por suaves voces, haciendo que Anneliese y Sirius se separaran rápidamente entre sí por el pánico.

La mano de la chica sureña ya estaba en su varita, mientras que Black se había parado frente a ella a la defensiva. Anneliese miró su estado de serenidad con una pequeña sonrisa ante cómo él inmediatamente se había movido para protegerla a ella primero que a él mismo.

El aire estuvo completamente en silencio durante unos segundos y no se escuchó ni un solo sonido además de los golpes en sus oídos.

Inclinando su cabeza ligeramente hacia atrás y hacia abajo mientras mantenía sus ojos al frente, Sirius le susurró en voz baja.

"Qué opinas-"

"Realmente a través de ustedes dos, adorables palomas, por un bucle, ¿no?" Se escuchó un fuerte grito demoníaco detrás de ellos mientras Peeves zumbaba a través de sus estómagos. "¡Deberían haber visto sus caras!"

Los dos Gryffindors dejaron que la tensión cayera de sus hombros, pero ese alivio rápidamente se convirtió en molestia y diversión que comúnmente se asociaba con el poltergeist.

"¡Y ya pasó el toque de queda!" chilló de alegría, aplaudiendo con sus manos regordetas. "¡ESTUDIANTES FUERA DE LA CAMA! ESTUDIANTES FUERA DE-"

"¡Me molesta!" Anneliese chilló, entrecerrando los ojos furiosamente. "¡Hemos acordado no hacerme esto!"

"Mi alianza es sólo contigo", respondió Peeves con una sonrisa malvada. "Puedo causar una distracción para que escapes , pero a él no le he jurado lealtad".

Black tragó saliva mientras los dos bromistas se miraban fijamente antes de que Anneliese se inclinara hacia adelante y le susurrara algo, poniéndose de puntillas.

"Bien", dijo Peeves, sacándole la lengua a Sirius con un ruido fuerte e inmaduro. "Tienes suerte de que sea tan inteligente, de lo contrario el querido Argry tendría una visita esta noche".

"¿Qué diablos le dijiste?" preguntó con los ojos muy abiertos mientras trotaba ligeramente para alcanzar donde ella ya había comenzado a caminar rápidamente de regreso a la sala común. "Parecía un poco asustado."

"Agujeros en la lógica, ¿recuerdas?" Anneliese respondió con una sonrisa maliciosa. "Fácil de encontrar."

Sirius estaba a punto de preguntar algo más antes de que ella extendiera su brazo frente a su pecho y usara una sorprendente cantidad de fuerza para golpear su espalda contra la piedra.

Black miró hacia abajo con una leve sonrisa y simplemente lo aceptó antes de volver a mirarla.

"Escuché a alguien y te habrías topado con ellos", susurró Callaway a modo de explicación, con la cabeza todavía mirando a la vuelta de la esquina. "¿No acabas de escuchar pasos también?"

"No," susurró Sirius, inclinándose hacia adelante contra su brazo también. "Sin embargo, creo que tienes mejor oído que yo".

Anneliese supo en silencio que era verdad. Sus habilidades de búsqueda fueron un testimonio de eso, así como cuando escuchó a Regulus llorar desde un pasillo de distancia.

"Ya se han ido", dijo en voz baja después de una pausa de unos segundos. "Deberíamos estar listos para partir. Señor, sería mucho más fácil si pudiéramos ver a través de las paredes o algo así. Debería haber un hechizo para eso".

𝚃𝙸𝙽𝚃𝙰  -  𝚂𝚒𝚛𝚒𝚞𝚜 𝙱𝚕𝚊𝚌𝚔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora