1 Aaliyah

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La ansiedad me consume, me agobia, me atormenta,
como un fuego que arde sin cesar en mi mente inquieta.
Me siento atrapado en un torbellino de pensamientos,
que me llevan a un abismo de miedo y tormentos.

Mi corazón late desbocado, mi respiración se agita,
siento que el mundo se derrumba y la calma me grita.
Intento escapar de esta prisión invisible que me aprisiona,
pero la ansiedad me persigue, me acosa, me abandona.

Busco refugio en el silencio, en la soledad de mi ser,
pero la ansiedad me sigue, no me deja vencer.
Quiero encontrar la paz, la tranquilidad perdida,
pero la ansiedad me susurra que soy una herida.

A veces siento que no puedo más, que voy a caer,
pero sé que debo luchar, resistir, vencer.
La ansiedad es un monstruo que intenta devorarme,
pero sé que con fuerza y valentía podré enfrentarme.

Así que levanto la cabeza, respiro profundo y fuerte,
y decido plantarle cara a la ansiedad, hasta la muerte.
Porque sé que soy más fuerte de lo que imagino,
y con amor y esperanza, podré encontrar el camino.

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