Su corazón es MÍO [KaraTodo/AtsuTodo]

Avanzar

Atsushi estaba preparándole un exquisito té de hierbas a Todomatsu.

Le pasó la taza y posteriormente se sentó a su lado.

—Gracias por escucharme, necesitaba desahogarme— Le da un sorbo al té. —Sabe delicioso, ¿Qué es lo qué tiene?

—Es una infusión de bugambilia, con un toque de lavanda, pizca de limón y miel— Le guiña el ojo. —Me alegra saber que te sientes mejor Totty, siempre puedes contar conmigo para lo que sea

—No se como agradecer la hospitalidad que has tenido conmigo

—Por eso no te preocupes, es lo que hacen los amigos— Le regala una dulce sonrisa.

Le sonríe de vuelta. —Si no es mucha molestia ¿Podría bañarme?

—¡Claro! Dame un ratito, iré a preparar la tina

Veo como se va de la sala, me ponía feliz el haber coincidido con Atsushi.

Analizándome hacia el pasado me hubiera gustado ser más amigable con él, yo lo consideraba mi "nemesis". Atsushi era amable conmigo, la verdad siempre lo fue, pero mi envidia se interponía.

Dicen que por algo suceden las cosas, esta podría ser una oportunidad para conocerlo mejor y tal vez en un futuro formar una amistad.

—Totty ya puedes entrar— Atsushi se acerca a mi para pasarme unas toallas. —Deje el agua abierta, puedes meterte a la tina y apagar el agua cuando sientas que ya está llena. Al salir ve a mi habitación, te dejare sobre la cama un pijama

—Gracias por todo, eres muy amable

—¡No hay de que! Yo saldré un momento porque tengo que hacer cosas del trabajo, no se ha que hora regrese así que si gustas puedes dormir— Atsushi miraba el reloj de la pared. —Igual me preocupa dejarte solo en este estado, podría llamar a mi cliente y así...

—Para nada, ve tranquilo— Lo interrumpí. —Yo estaré bien, cualquier cosa nos hablamos por celular

—Bueno... estaré atento al celular por si me necesitas— Lo abraza. —Nos vemos más tarde, no es necesario que me esperes, si te da sueño puedes dormir— Al decir lo último me pellizca un poco el cachete.

Me sonrojo por el acto. —Entraré a bañarme antes de que se haga más tarde, cuídate al salir

—Sécate bien el cabello y te abrigas, adiós— Atsushi me regala una sonrisa y se va.

Me encamino hacia el baño, al entrar veo un gran espejo junto al lavamanos, una taza color blanco, la tina que por lo visto era cuadrada con su regadera, al menos esta parte del departamento era un poco más "sensilla".

Me acerco para ver mi reflejo, me veía tan demacrado.

Comienzo a desvestirme y de paso quitarme las cosas que me colocaron por las heridas, saco de mi bolsillo mi celular y entró a la tina.

El agua era tibia y bastante relajante, me gustaba la sensación del agua en mi cuerpo.

Empiezo a navegar en internet, ya que tome la decisión de superar mi corazón roto y poder remediar mi error.