fiera

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Pov Marcel

Me levanté a las 6 de la mañana, gracias a mi querida y obstinada alarma.

Lo confieso no tenía ningún deseo de ir hoy a trabajar . Estaba demasiado cansado.

Pensé que el trabajo no sería tan cargador ,pero resultó ser bastante agotador .

A decir verdad sólo iba para ver a Andrea .

Respecto a Andrea ,cada día me gustaba más y bueno no puedo negar que si me encantaba provocarla.

Me gusta demasiado pasar tiempo con ella y bueno comermela de vez en cuando y cuando se daba la oportunidad era aún mejor.

Me digné a levantarme de la cama e ir al baño a bañarme. Y por alguna extraña razón me dió por mirarme en el espejo

¡Joder me había hecho un chupetón la muy condenada!.

Bueno uno no ...tenía chupetones hasta en el abdomen.

Me las va a pagar lo juro.

De repente mi móvil vibró. Debe ser un mensaje de WhatsApp.
Encendí el móvil para ver que era y si tenía razón era un mensaje pero de quién menos me lo esperaba.

pequeña extrovertida:buenos días engreído

Yo:buenos días fiera

pequeña extrovertida:¿como se encuentra ese hermoso y sexi cuello?😂

Yo:¿quieres ver?

pequeña extrovertida:buenoooo....😊

Yo:

pequeña extrovertida:que lindo 🥺😂😂

Yo:veremos si te vas a reír igual cuando te castigue por haber hecho esto fiera

pequeña extrovertida:hablamos luego idiota

Yo:deja que yo te coja😉

No respondió más la muy condenada.

Deja que yo la coja.
Me las va a pagar demasiado caro.

Cuando terminé de bañarme me dirigí hacia mi armario. Para buscar la ropa que me iba a poner para hoy. Ropa que obviamente debía tapar los chupetones.

Busqué y busqué en mi clóset hasta que encontré esto:

Para mí mala suerte ,si se nota un poco el chupetón que se encontraba en mi cuello.

Me puse hielo en el cuello para que bajara aunque sea un poco la inflamación y el moretón.

Por suerte si bajo un poco, pero aún se seguía viendo y eran las 7 de la mañana y ya no tenía tiempo para hacer algo más . Así que cogí mis cosas y fui para la empresa.

En cuanto puse un pies en la empresa me encontré a mi hermano Iván , a mi queridísima fiera y a mi mejor amigo Romel conversando sabrá Dios sobre que.

Decidí ir hasta donde estaban ellos para saludarlos o mejor dicho para provocarla.

En cuento llegué al grupo, ella me miró de arriba a abajo con deseo.

—buenos dias—dije para mi hermano y para Romel ,ellos también hicieron lo mismo—buenos días extrovertida—dije nuevamente ,esta vez para Andrea dedicándole una sonrisa de ¡Me las vas a pagar!.

—buenos días idiota—dijo con una sonrisa triunfante

Mi hermano y mi mejor amigo empezaron a mirarse de forma extraña. Como si se estuvieran diciendo algo con la mirada

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