Ayame Uchiha; La Fuerza Del Dolor [Naruto]

Prólogo

Prólogo

Una pequeña niña de cabello y ojos azabache de 7 años se encontraba en la parte trasera de su hogar, estaba sentada mirando hacia el cielo, en sus ojos se notaba un brillo de emoción, le encantaba ir por las tardes y esperar el atardecer, era su momento favorito del día. 

Shisui Uchiha, el hermano mayor de la pequeña niña, se sentó a su par en silencio, observando en la misma dirección que su hermana veía, ambos respiraban tranquilamente apreciando el buen tiempo. Ayame Uchiha, que era el nombre de la niña, miró a su hermano por el rabillo del ojo y se sorprendió al verlo allí, él casi nunca estaba en casa y mucho menos acompañándola. El mayor sintió la mirada confundida que su hermana le daba y se volteó a verla con una pequeña sonrisa en sus labios, algo que sorprendió aún más a la pequeña, de modo que soltó una vaga risa nerviosa. 

— ¿Q-qué haces aquí, Shisui? —Preguntó sonrojada, devolviendo la vista hacía el paisaje frente a ella, que encontraba hermoso y a la vez relajante. — Creí que estabas en una misión. 

Shisui suspiró, era demasiado difícil para él. 

— Quería hablar contigo, Ayame. Es algo importante. — Comentó en un murmullo bajo. 

— ¿De qué trata? — Preguntó la pequeña niña azabache haciendo una mueca de confusión.

 Intentó recordar si había hecho algo mal durante esos días, pero no, ella era bastante tranquila.

— Quiero que seas fuerte, ¿Está bien? —Shisui sólto de golpe, tragó saliva y fijó su vista en Ayame, ella inmediatamente se volteó a verlo más confundida aún.

— ¿Qué ocurre? ¿Por qué dices eso?

—Prométeme que serás fuerte y confiarás en Itachi. — Pidió bajando la mirada hasta sus manos, atemorizado con la imagen de su hermana llorando sola en un futuro cercano. 

Ayame se asustó con las palabras de su hermano y no dudó en preguntar.

— ¿Por qué?

— Solo promételo, ¿Está bien? — Shisui se veía desesperado por oír su respuesta, Ayame notó como un par de lágrimas rodaban por las mejillas de su hermano y sintió como su corazón se oprimió al verlo llorar.

— Lo prometo, Shisui.

Y Shisui abrazó a su hermana permitiéndose llorar con la calidez que la pequeña le brindaba. Ayame por su parte no comprendía absolutamente nada, pero terminó derramando un par de lágrimas también por la emoción que su hermano le transmitió.

— Te amo Ayame, no lo olvides, por favor. — Susurró entre sollozos. 

🍡🍡🍡🍡🍡

Editado.

ByMimotoki.