Sin Control - [Kookmin]

❤️Capítulo 16❤️

Ya faltaba poco para llegar y volvieron a las calles cerradas por ellos mismos, Jungkook estaba concentrado, a ojos de Jimin era como si estuviera esperando algo y así fue, el contrario presionó nitro, a lo que Jungkook respondió con un "te adelantaste", aceleró a todo lo que daba el auto y luego presionó un botón rojo, que Jimin supuso era el nitro.

La velocidad a la que iban era impresionante, y aunque Jimin se estuviese cagando de miedo sentía que podría volar sin ningún problema y en cualquier momento, pasaron a toda velocidad a un lado del contrario alcanzándolo. Este último se encontraba sumamente frustrado.

Jungkook atravesó la línea de meta, siendo el ganador, siguió avanzando y se estacionó donde se encontraba su grupo de amigos, bajo del auto, aplausos, silbidos y gritos se hicieron presentes, Jungkook caminaba a la puerta de Jimin. Al llegar la abrió y así Jimin pudo salir.

Todos los demás seguían atónitos era la primera vez que veían a alguno de los corredores del grupo "Bangtan" con alguien más, además de la manera en como Jungkook lo trataba. Jungkook se acercó más a Jimin.

— ¿Estás bien?.— Jimin miró sus ojos.

— Sí, lo estoy.— respondió bajo la atenta mirada de todos.— aunque sintió que casi haya muerto minutos atrás. Miró a Jungkook.

— Bien.— se limitó a responder mientras observaba como un auto se acercaba a ellos. Una chica se acercó a Jungkook, entregándole el dinero que había ganado.— Gracias.— respondió, la chica asintió y se fue.

El conductor apago el auto y se acercó a Jungkook.

— Toma 1.000.000 KRW, un trato es un trato.— Jungkook sonrió y negó.

— Jamás estuve de acuerdo con ese dinero, quédatelo y no te le acerques nunca.— respondió, luego tomó la mano de Jimin.— Vamos.— Jimin se limitó obedecer.

— Oye... ¿estás consciente que arruinaste una increíble salida con ese sujeto?.— preguntó Jimin.

Jungkook volteó y lo miró a los ojos.

— Es un idiota.

— Tú también lo eres.

— Es diferente.

— No, no lo es. Además, ¿por qué me trajiste acá?.— se encontraban en un lugar alejado del resto con vista a la ciudad.— Mira que no quiero que esto sea malinterpretado.

— Sabía que tendrías dudas, entonces... habla.

— Bueno, ¿desde cuándo haces esto?, ¿qué haces con el dinero que ganas y dónde guardas ese auto?.— preguntó señalando en dirección al vehículo.

Jungkook sonrió.

— Desde que estoy en último de preparatoria, el dinero lo ahorro... aunque no lo creas, tengo demasiado ahorrado.

— Créeme que te creo.— Jungkook sonrió.— Solo en eso te creo.— aclaró rápidamente.

— Y con la última pregunta, en casa de los Min, pero eso es otra historia.

— Entiendo.

Jimin volvió a mirar a Jungkook, ninguno de los dos podían apartar la mirada del otro. Su momento fue interrumpido por sirenas y un Taehyung que se dirigía hacia ellos a toda velocidad.

— Chicos, no quise ser yo el que interrumpiera su momento romántico, pero... se acercan policías.— soltó como pudo y regresó por su auto.

Jungkook tomó a Jimin del brazo y rápidamente se dirigió a su auto, ambos subieron y Jungkook aceleró, se escuchaban gritos y personas encendiendo sus autos para también marcharse de ese lugar.

— ¡Alto ahí!... Es la policía.— habló un hombre.

Varios de los presentes fueron atrapados, mientras otros huían. Y otros eran perseguidos por patrullas.

— ¿A dónde vamos Jungkook?.— preguntó Jimin.

— A casa de los Min. Te dije que ahí guardo el auto, además, ahí esta mi otro auto. Con ese volveremos a casa, a menos que quieras ir a otro lugar.— dijo Jungkook mientras levantaba ambas cejas.

— Si que eres un idiota Jeon.

Al llegar ambos jóvenes bajaron del auto, en la casa, ya se encontraban Jin y hobi.

— Chicos me alegra que hayan podido escapar.— habló hobi.

— Sí, Taehyung nos avisó antes de marcharse. ¿Yoongi esta?.— preguntó Jungkook.

— Oh sí, está adentro.

La puerta principal fue abierta dejando ver a un hombre de piel muy clara, incluso más que la de Jimin.

— ¿Hablaban de mí?.— preguntó con una sonrisa.— Kook, me alegra verte.

— Lo mismo digo Yoongi.

— Sabes he tenido mucho trabajo aparte, pero ven a visitarme de vez en cuando, no seas un malagradecido.— comentó el Sr. Min. Este último notó la presencia de Jimin.— Oh hola, supongo que eres la pareja de kookie.— mencionó el Sr. Min.

Jungkook sonrió.

— No lo es, es mi hermano.— habló Jungkook.

— Realmente no lo somos, por desgracia somos hermanastros, un gusto, Park Jimin.— interrumpió Jimin.

La actitud de Jimin le resultó agradable al Sr. Min, tenía carácter. Sonrió.

— Lo mismo decía mi esposa.— comentó el Sr. Min haciendo a todos los chicos sonreír.— Bueno, eres bienvenido, mi casa es tú casa Jeon Jimin.— soltó con una sonrisa volviendo a entrar. Dejando a los presentes atónitos por lo dicho.

— Iré por el auto.— comentó Jungkook con una sonrisa e inmediatamente se retiró.

— Me disculpo en nombre de mi padre minnie.— habló Jin.

— Cuando las personas le agradan bromea con ellas.— agregó esta vez Hoseok.

— Está bien, noté que es un gran hombre.— comentó Jimin con una sonrisa.

— Además Jeon Jimin... suena bien.— dijo luego Jin, Jimin bufó.

— Oye Jeon Jimin, mueve tú trasero al auto.— habló Jungkook, provocando que los hermanos Min rieran.

Jimin volteó y empezó a caminar sensualmente hasta la ventana del auto donde se encontraba Jungkook.

— Quisieras querido, pero ese puesto le pertenece a una perra aprovechada.— comentó retirándose, dió la vuelta al auto y subió.

Los hermanos Min observaban a ambos chicos, el semblante de Jungkook había cambiado. Y sin más emprendieron camino a su casa.

— Escucha Jimin, deja de referirte a Lisa de esa manera.

— Puedo hacerlo, nada me lo impide, esa bruja solo me utilizó para acercarse a tú puto pene.— soltó mordaz.

— Jimin, ya basta, por favor.

— Te aguantas Jeon, ¿sabes qué?, esto no tiene sentido, olvídalo.— dijo mirando por la ventana.

Una vez en casa, bajaron del auto y por obvias razones pensaban entrar por donde habían salido. Jungkook se ofreció a ayudar a Jimin pero este se negó.

— No soy un idiota, ni mucho menos un debilucho como lo es tú noviecita.— subió y entró a su habitación.

Jungkook soltó un suspiro cansón y también lo hizo.

Los días fueron pasando y la relación de Jimin y Jungkook era como en un principio, solo que ahora los insultos de Jimin también iban dirigidos a Lisa.

Un día sus padres habían salido a cenar, dejando a los jóvenes solos o eso pensó Jimin hasta que escuchó gemidos provenientes del cuarto de Jungkook. Jimin estaba furioso pero más que eso dolido al escuchar la voz de Lisa, o sí, esa voz tan irritante para sus oídos. Molesto se fue a su habitación no tenía pensado llorar, no, aunque sintiese muchas ganas de hacerlo, limpió las pocas lágrimas que lograron salir y salió de casa.