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ㅡ ¡Abres tú o abro yo, y créeme que no quieres que yo la abra!

Opp estaba que le botaba la puerta a su prima.

Llevaba encerrada ahí casi cinco horas, y sabía que algo andaba mal, pues era ya costumbre de que cuando llegaba a casa, Freen siempre estaba para recibirlo, o en su cuarto, pero no a puerta cerrada y menos con llave, por lo que supuso que algo terrible tuvo que haberle sucedido, ya que dentro no se escuchaba nada.

Guardaba una copia de la llave del cuarto de la menor, pero para su suerte, no la encontraba y había olvidado dónde la pondría.

Muy mal, Weerapong, tu prima de seguro está muerta y tú no te has dado cuenta. Pensó.

Freen por su lado, estuvo soltando todo aquello que había estado acumulando desde aquella primera interacción con el novio de su mejor amiga. Se repetía una y mil veces que desearía ser él para poder tener lo que amaba.

Becky, claramente, era su todo y sentía que estaba perdiéndola poco a poco. Aunque podía llegar a ser exagerado, pues Rebecca seguía estando para ella, sólo que un poco más distantes ya que, bueno, ahora pasaba más tiempo con Kai.

Se había tumbado junto a su cama mientras sus brazos abrazaban sus piernas. La canción había dejado de sonar desde que entró a su casa, por lo que sólo podía escuchar sus sollozos.

Y lloraba, lloraba como si no hubiese un mañana.

Se sentía tan dolida, tan mal, pero también se sentía mal consigo misma por estar llorando porque su mejor amiga tuviera pareja, y a pesar de que le dolía ...porque la quería un mundo y pensaba que la perdería..., tenía que apoyarla.

Y eso era justamente lo que no estaba haciendo.

ㅡ ¡Por fin abrí la maldita puerta! ㅡ Opp entró básicamente luego de que encontrase la llave y corriera a ver si Sarocha estaba viva ㅡ. ¡Tanto te costab...! Oh, mierda, Saro, no.

La rabia que le consumía porque Freen se estuviera adentro sin dar señales de vida, se le bajó y se suavizó. Todo con ver su primita alzar la cabeza con los ojos y la nariz roja, con lágrimas aun brotando por sus mejillas, pareciendo no querer parar.

ㅡ Qui...Quiero estar sola. ㅡ pidió Freen

Deseaba estar encerrada en su burbuja, sola y triste mientras continuaba ahogándose en sus penas.

ㅡ D-Déjame sola, Opp, p-por favor.

ㅡ No voy a preguntar qué pasó ㅡ el rubio se acercó a paso lento hasta la menor.

Acunó el rostro de la chica entre sus manos, viendo sus ojos brillosos por las lágrimas, sintiendo su corazón estrujarse. Le limpió una lágrima que rebeldemente caía por su mejilla, caliente, y apenas le sonrió, tratando de confórtala.

Freen hipó una vez más, mordiendo su labio tratando de no llorar, pero terminó por hacer un puchero, mientras le temblaba el labio.

ㅡ Me voy a quedar contigo, Freen.

Y volvió a romper en el llanto que según ella ya había apenas controlado. Lo hizo porque esas palabras también fueron dichas por Becky, y las marcó en su corazón, siempre.

Opp se sentó junto a ella y la abrazó. A veces podía ser un malhumorado, odioso y con bajo temperamento, pero cuando se trataba de su prima, era todo lo contrario, pues se había criado con ella y básicamente lo quería como a una hermana.

La había visto en sus mejores y también sus peores momentos, y claramente, había estado para ella y ser su hombro en el que llorar.

Justo como ahora.

Freen lloraba desconsoladamente en su hombro, mientras Opp la apoyaba más contra sí mismo.

Le acariciaba la espalda, esperando a que pudiera calmarse un poco.

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Cerca de la una de la mañana, Freen estuvo ya un poco más tranquila. Tenía su carita hinchada, los labios rojos, sus ojos apenas podían verse, y su nariz tenía la punta de color rojo.

Opp tuvo que llevarla cargado hasta la cocina, dejándola frente a él y alcanzarle un vaso de agua.

ㅡ ¿Ya me vas a decir qué pasó? ㅡ preguntó sentándose a su lado.

Freen suspiró, quiso controlar lo que sentía.

ㅡ B-Becky tiene no-novio ㅡ le tembló el labio al hablar.

Opp cerró los ojos, sabía del crush de Freen en su mejor amiga, había estado también en todo ese proceso. Desde que peleó consigo misma, hasta ahora, él había sido testigo de mucho de lo que Freen se guardó con respecto a eso y no fue capaz de decirle a Becky.

ㅡ Saro...

ㅡ N-No digas nada ㅡ bajó su vista ㅡ. Vamos a dormir.

Opp asintió, llevándola hasta su cuarto. Caminó con la cabeza gacha todo el trayecto, y callada.

Se dirigió hasta el cuarto de Opp, no tenía ánimos si quiera para acomodar su cuarto, por lo que se acomodó en la cama de su primo. Opp rio un poco, sabía que debía sentirse realmente mal como para querer dormir con él, ya que a Freen no le gustaba dormir con nadie.

Se acostó en la cama, y Opp la arropó y justo cuando se iba a dar la vuelta para apagar la luz, Freen tomó su mano.

ㅡ No me dejes sola, por favor.

El rubio la vio con una ligera sonrisa. ㅡ Sólo voy a apagar la luz.

Y aunque no quisiera, lo soltó, pero regresó en un abrir y cerrar de ojos.

Se acomodó al lado de la rubia, y está lo abrazó, atrayéndolo, buscando su calor, cosa que no fue negada por el rubio.

ㅡ Descansa, Freen ㅡ revolvió su cabello.

ㅡ Gracias Oppy, por estar para mí ㅡ sollozó, mas no lloró ㅡ. Descansa.

ㅡ Siempre, Freen, siempre.

I wish「 Freenbecky 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora