A la deriva

El mundo se hace más pequeño

No pudimos dejarlos más en el cuartel, ya no podíamos volver allá cada doce horas y cambiar lugares, era demasiado complicado, la situación cada vez se ponía peor y no podíamos dejar el campo de batalla por menos de una hora, no recordaba ni cuando había dormido más de cinco horas a ese punto, volví a dormir en el suelo, el suelo de un búnker.

Al despertarme por el sonido del despertador me estiré, despertando en el proceso a Nightmare, quien me estaba abrazando por la espalda, suspirando y abrazándome más fuerte.

Nightmare: ¿Tan pronto...?

Killer: Si... Son las... Tres de la mañana

Nightmare: Me toca a mí hacer de comer

Dream: Ya me encargué de eso, se despertaron tarde

No, no estábamos durmiendo solos, ya quisiera, en ese lugar las condiciones eran deplorables, estaba viviendo toda la familia de los loquitos de los sentimientos, todos juntos en un búnker de tamaño más pequeño que nuestro cuarto anterior.

Y si creen que esta era una situación que se acabó rápido, no, no lo fué, si no me fallan las cuentas duramos unos dos años en el ambiente de relevos y otros tres de búnker, esos míseros años tan largos que hicieron que no pudiera más con mi alma y se saliera todo mi instinto asesino del cuerpo, junto al de todos los demás.

Así que para este punto acostumbrado ya estaba al olor a hierro y despertar más cansado que cuando me iba a dormir, al menos ya las tropas estaban más débiles del otro lado, aunque del nuestro también.

Me levanté, llendo a lavarme las manos para poder frotarme la cara, no quería tener una infección en los ojos por andar tocando el piso y luego mis cuencas.

Nightmare se levantó después, llendo de inmediato a revisar a los pequeños no tan pequeños.

La vida pasa rápido, el resumen que les hice pasó tan rápido que a este punto X ya tenía 13 y Lux 9, ellos se quedaban todo el día cuidando de Mike y Moon ya que nosotros ya no teníamos tiempo ni para eso, aún seguían dormidos, así que Nightmare solo le dió un pequeño beso en la frente a nuestros bebés y fué a comer el desayuno improvisado que nos teníamos que terminar en unos diez minutos.

Dream: No te preocupes, tengo un buen presentimiento sobre hoy, estamos por acabar con esto

Nightmare: Dijiste eso las últimas cinco veces, a veces siento que no se debilitan tanto como creemos

Killer: Pues creo que por lo menos un poco sí se han debilitado, no me he llevado heridas serias en un mes

Nightmare: Eso es cierto, supongo que sí se están calmando

Tomó un buen sorbo de café antes de ir a buscar armas.
El único problema es que las cuida Cross, así que Dream y yo vimos como pasaba una incómoda interacción de ambos tratando de voltearse a ver lo menos posible mientras se pasaban las cosas.

Luego, todos fuimos a armarnos y salimos del búnker.

Como siempre teníamos que ir a nuestros puestos e impedir que nuestros enemigos pasaran del área en la que estaban por ahora, de algún modo habíamos logrado mantenerlos muy a raya, pero no podía ponerme de egocéntrico al respecto, no quería decir nada por si eso solo lograba que nos ganaran más territorio.

Todos los días era lo mismo, era tan metódico y nada nuevo pasaba, fué sinceramente horrible, si odio algo más que las cosas tristes es que todo sea lo mismo, véase mi forma de contar historias en las que no pude mantenerme hablando del mismo año por menos de unos minutos y me salté de año en año.

Y ahí estaba yo, peleándome con medio mundo, Nightmare me cubría las espaldas, es bastante bueno en combate cuerpo a cuerpo, no le gusta que le diga a la gente pero es todo un veterano de guerra, y yo lo quiero así.

Pasamos horas y horas ahí afuera, cada vez me sentía más cansado, él también lo estaba, todos lo estaban.

A este punto solo nos dábamos uno o dos golpes y nos dejábamos ir, parecía que estaba por hacerse realidad lo que dijo Dream, ya podríamos irnos tarde o temprano y todo volvería a la normalidad, podía volver a casa y sentir el alivio de dormir en una cama cómoda al lado de mi novio, despertar y darles el desayuno a mis niños, besar sus frentes y luego desearles un buen día, inscribirlos en la escuela incluso, podrían por fin retomar los estudios.

Pero ahí fué cuando desde los gritos de nuestro superior escuché como indicaban que todos se cubrieran con algo, Nightmare se alarmó y se mostró alerta por completo, mirándome con un rostro de preocupación.

Mi vista recorrió a todos nuestros aliados, todos estaban agrupados los unos con los otros, cubriéndose con lo primero que encontraban, desesperados.

Y en cuanto logré posar mi vista en Nightmare por última vez percibí como sucedía... Algo peculiar, el cielo nocturno se nubló por un blanco aterrador y absoluto, no podía escuchar nada, no podía ver nada, un sentimiento vagamente familiar, al punto de ser nostálgico. Luego sentí varios golpes, ese blanco se volvió un tono de negro total.

Y yo perdí el conocimiento.