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El grito de Jieun resonó en la habitación en donde moraba Minho.

Hyeong miro enojada a su hija la cual estaba en el suelo por el reciente manotazo que recibió en su mejilla.

Ambas alfas se miraban confundidas y de cólera, el ambiente era tenso y se sentía lo pesado que se sentía. Jieun intentó colocarse de pie pero no se espero la mano de su madre estamparse nuevamente sobre ella.

-¡Solo tenías que hacer una sola cosa Jieun!- grito Hyeong, ignorando que podría escucharse en las habitaciones de sus huéspedes. -Solo tenías que vigilar a Minho-.

-¡Yo no tuve la culpa!- Jieun se defendió. -Cuando vine, Minho ya no estaba- gruño al borde del llanto, no soportaba los golpes de su madre y menos si el culpable era Minho.

Jieun sabia perfectamente lo cruel que podria ser su madre y había sido testigo lo dura que era al enojarse. Lo había visto en Minho y ella no quería pasar por lo mismo.

-Jodida mierda- la alfa tenía unos ojos rojos intensos por la furia que sentia. -La jodida mierda de Minho escapó en nuestras putas narices-.

Jieun quiso replicar, tenía ganas de lanzarse a su madre por humillarla.

Pero aun asi no hizo nada. Simplemente se quedó callada.

-Esa escoria siempre fue una carga- Hyeong miro a Jieun. Su mirada era nuevamente normal. -Por lo menos ya no nos molestara-.

Jieun subió la mirada hacia su madre.

-¿Enserio no te importa?- preguntó lo obvio.

-No- le resto importancia. -Te aseguro que el único que se va a alterar será tu padre-.

-Claramente, sabemos que desde un inicio ama a Minho pero tu lo obligaste a odiarlo y el como el idiota que es te hizo caso-.

Jieun se coloco de pie.

-Pero aun asi- Hyeong sonrió irónica. -Piensa que se libro, pero lo buscaré- la alfa mayor camino hasta la vieja ventana de la habitación y la tiro rompiendola en el proceso. -Lo buscare y lo matare con mis propias manos-.

Jieun jamás habia visto la maldad completa que poseía su madre, pero simplemente se sintió aliviada de no ser sirvienta de la familia. Iba a replicar sobre Minho pero se le fue la idea al recordar que Jisung se iba ir y posiblemente jamás lo volvería a ver y su plan de tener poder y dinero se iba ir por la borda.

-Mamá ¿Que haremos con Jisung?-.

-Pues al parecer tu no lo calientas lo suficiente como para que se case contigo- Hyeong gruño. -Eres una puta Jieun, todos los hombres caen redonditos-.

Jieun abrió sus ojos ofendida por lo dicho, era cierto que ella se insinuaba a los alfas para conseguir dinero y asi poder complacer su codicia, pero su madre jamás le había hablado de esa manera.

- Debes intentarlo por una jodida vez más- Hyeong miro a su hija sin ninguna expresión en el rostro.

-¿Qué sugieres?-.

-Dale una pastilla, de esas que uso para dárselas a Taeil cuando no quería golpear a Minho o de esas que tomaba yo cada que me acostaba con tu padre-.

Jieun sorprendida no evito preguntar.

-¿Que quieres decir?-.

-Taeil ama mucho a Minho y yo no- la alfa hablo con odio. -A pesar de ser mi hijo no lo quiero, nunca lo quise y solo lo tuve por Taeil- se quedó un momento callada recordando las veces que su esposo defendia a Minho. -Yo conoci esa droga antes de tener a Minho, es muy efectiva. Produce cambios de actitud, excitación y demaciadas estupideces-.

Omega Moon | HanknowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora