04

266 36 18
                                    

Izuku estaba en un pasillo, la alfombra roja en sus pies y la rubia maestra viendolo de forma seria con Eijiro detrás

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Izuku estaba en un pasillo, la alfombra roja en sus pies y la rubia maestra viendolo de forma seria con Eijiro detrás.

— Vamos Midoriya-Kun... Ya te dije lo que debes hacer, ahora, hazlo.

— E-esta bien...

— ¡Tu puedes Midoriya! — el pecoso suspiro, mirando la enorme alfombra roja, él podía hacerlo.

Seguro de sí mismo se puso firme y recto como le había dicho la rubia, levantó el mentón y miro de forma neutral el lugar, dió el primer paso y cayó... Literalmente se cayó al dar el primer paso estampando su rostro contra la alfombra roja.

— ¡M-midoriya! — el pelirrojo se acercó de golpe al menor, Izuku s loe sentó en su lugar sobando su nariz y frente, mientras el pelirrojo se agachaba a su altura — ¿Estás bien?

— Sí... Creo...

— Dios Midoriya... Es la cuarta vez que te caes de cara al suelo — menciono con molestia la rubia.

— L-lo siento Takeyama-San

— Ugh... Vamos de nuevo — el pelirrojo ayudo a Izuku a levantarse, lo guío al inicio de la alfombra y se fue detrás de la rubia — suéltate Midoriya-Kun, respira, aquí no hay nadie, solo eres tu siendo una diva, así de simple cariño — el pecoso trago grueso — vamos mi amor, tu romperlas estándares — dijo con un brillo eztraño en sus ojos.

Izuku suspiro, el podía hacerlo, quiza no era su sueño que todos lo vieran, pero si se lo pedían, era porque tenia el potencial, nuevamente se acomodo como se lo habían dicho y ahora sí suspirando listo se planto y comenzó a caminar, su mirada neutral y seguro de si mismo, totalmente divino ojos estaban por completo llenos de brillos al verlo.

Por otro lado Kirishima veía al menor, sorprendido por aquel don que el pecoso parecía tener, sonrió de una forma extraña, como alguien que acaba de encontrar la joya mas valiosa del mundo.

— ¡Perfecto Midoriya-Kun! ¡Dios eso fue divino! — el menor apenado sonrió, la mayor le aplaudió al igual que el pelirrojo — por hoy hemos terminado, estoy encantada, tienes un don oculto pequeño — la mayor guiño, tomo sus cosas y comenzo a irse dejando solos al menor y a Eijiro.

— En serio eres una estrella Midoriya... Sin dudas llegarás muy alto — el menor se sonrojo por el halago.

— Gracias Kirishima-Sama... Pero, en serio esto me pone muy nervioso, no quiero ni pensar cuando realmente esté en alguna pasarela.

— Descuida... Es tu primera vez, luego tomarás más confianza — el menor sonrió, ambos caminaban por el pasillo, Izuku estaba listo para comenzar a buscar telas y hacer su verdadera vocación.

— Ahora sí me disculpa Kirishima-Sama, haré los nuevos diseños para la siguiente pasarela — hizo una reverencia y comenzo a irse, el pelirrojo vio al menor llendose, cuando su teléfono comenzó a vibrar, lo tomo y noto el nombre "Jefe".

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 14 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Should I give a second chance to Cupid? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora