Mi corazón latía rápido en mi pecho.
Sentí como mis mejillas se calentaban y poco a poco se empezaban a teñir de rojo. Tanto por la indignación de, que esos pijos gilipollas, pedazos de basura groseras, hayan osado en comerme el culo y mis chichotas con sus sucios ojos, como también por a ver recibido tantas atención a la vez y que además cada una reflejaban cosas distintas hacia mi o hacia los grandísimos hijos de puta que deje atrás.
Por ejemplo:
Las miradas de las chicas que estaban cerca de esos capullos son juzgadoras, envidiosas y repugnantes. Y todas eran hacía a mí.
Como también algunas de las rápidas miradas desaprobadoras hacía los capullos y hacía a mí de las señoras ricachonas que están cerca de la zona VIP agarradas del antebrazo de sus maridos mientas presumen a los demás con una sonrisa hipócrita el cómo están orgullosas de a ver construido una familia "maravillosa" junto a sus cónyuges. Y escuchando como las demás viejas presumidas también hablan de sus familias pijas, solo para entras en una indirecta competencia sobre quien tiene más dinero y quien tiene aparentemente la familia más feliz, cuando en el fondo son solo un montón de infelices.
Muy profundo nuestro tremendamente rápido diagnostico Liz.
Cierto conciencia.
Aunque no todas las miradas que recibimos fueron desagradables. Al menos no las que recibí yo.
También había miradas sorprendidas.
Otras curiosas.
Y otras divertidas, como la del sexy Barman, la de Iban y por suerte la de mi hermana Joey, que al parecer ya lleva unos buenos vasos de coctel bebidos.
Por suerte esas miradas duraron como mucho, diez segundos. Luego todo siguió igual.
La música alta y un montón de gente de aquí para allá.
-Primero embobas al pobre barman... y ahora te peleas con esos pelados malcriados ¡Vaya manera de disfrutar de una fiesta Liz! -Me dice mi hermana Joey MUY juguetona... y cuando digo "MUY" en mayúscula, es que realmente estaba muy risueña y alborotada. Algo que es muy impropio de ella.
Yo le doy una mirada acusadora a Iban antes de hablar.
-Qué bueno eres para aguantarte un chisme ¿eh Iba? –Lo acuso, pero este solo se ríe y se encoge de hombros junto a Joey –Y... ¿A ti que bicho te pico? –Le digo a Joey con el ceño fruncido y luego me le acerco para olerla –Apestas a que te has gastado un montón de dinero en esas limonadas de color rosado... ¿Cómo es que se llaman? –Le pregunto.
- Pimm's –Me contesto Joey con una sonrisa –Y bueno solo gaste...
Joey me dijo el precio de cada vaso de esa dulce limonada rosada y por un momento pensé que se me caería la mandíbula al suelo.
-¡¡¡TODO ESE MONTON DE DINERO ME SERVÍAN PARA HACER CINCO COMPAS EN SHEIN CON MUCHA ROPA COOL!!! –Exclame sin alzar mucho la voz, aunque si lo hacía nadie iba a escucharme por el alto volumen de la música.
-Valía la pena –Dijo mi hermana con simpleza y con esa aura extraña de estar muy risueña.
-Psss por Dios... y ¿Al menos tiene alcohol esa cosa? Yo solo le sentí sabor a limón.
-Pues claro que tiene alcohol, es como ingerir una copa y media de vino, por cada vaso de esa "pequeña limonada"
¡¡¡JODER!!!
Con razón está así de pesada.
–Bueno, ¿saben qué? Yo también iré a tomarme una de esas y me ligare al.... –Estaba por nombrar al sexy Barman pero mi muy acusadora conciencia me recuerda que ya tengo novio, joder –No, no, no me ligare a nadie, solo iré a beber.
Luego de la corta platica con Joey e Iban, camino hacia la barra en donde está River mirando me.
Le echare la culpa al alcohol y a la adrenalina por la manoseada que nos dimos ambos esa noche en esa fiesta.
Al final, se suponía que esa sería mi última locura.
(***)
_______________________________
Nota de la autora:
¡¡¡AHAHAHHAHAHA Volví!!!
Después de largos meses con bloqueo escritor he vuelto con este corto pero divertido capítulo.
Estoy muy emocionada la verdad, porque ya son 1300 vistas.
Apoyen este y los anteriores capítulos, porfiiis 🌷.
Lxs amo, un beso desde el fondo de mi corazón negro.
ESTÁS LEYENDO
"MUY PRONTO PARA UN NOSOTROS"
RomanceEstá es la historia 𝘦𝘯 𝘥𝘰𝘯𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘭𝘰𝘤𝘶𝘳𝘢 𝘥𝘦𝘭 𝘢𝘮𝘰𝘳 𝘺 𝘭𝘢 𝘢ñ𝘰𝘳𝘢𝘯𝘻𝘢 de una relación distancia, son 𝘱𝘳𝘰𝘵𝘢𝘨𝘰𝘯𝘪𝘴𝘵𝘢𝘴. 𝘛𝘰𝘥𝘰𝘴 𝘵𝘦𝘯𝘦𝘮𝘰𝘴 𝘶𝘯𝘢 𝘮𝘢𝘯𝘦𝘳𝘢 𝘥𝘦 𝘴𝘦𝘯𝘵𝘪𝘳 𝘢𝘮𝘰𝘳 𝘩𝘢𝘤𝘪𝘢 𝘭𝘰𝘴 𝘥...