-capítulo 5-

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Avian pasado unos días desde aquel acontecimiento, jaekyung llegó de su entrenamiento nocturno, llevaba su maleta en un brazo y en la otra mano llevaba una bolsa de plástico, aparentemente de una farmacia, subió las escaleras totalmente inexpresivo.

Llegó a la habitación del Omega y se percató de la pequeña cantidad de feromonas que se alcanzaba a percibir "maldita sea Kim dan, que te eh dicho de apestar la casa?" fue su primer pensamiento pero al poner más atención al aroma se sintió cautivado, nunca avia sentido tan malditamente atractivas las feromonas de un omega

Entró a la habitación de huéspedes la cual mayormente habitaba dan, se percató de que el mayor ya estaba dormido pero lucia incómodo, aventó la Bolsa de plástico a la cama haciendo que el mayor se despertarse de golpe totalmente asustado.

--hay están las malditas pastillas, recuerda lo que te dije, no quiero un mocoso así que más te vale tomarlas, también hay pastillas para la fiebre aver si dejas de molestar.

El lenguaje de jaekyung era grosero y abrasivo, también se percibía confusión por el echo de las feromonas pero supuso que se debía al enlaze, dan solo miro la Bolsa que estaba a los pies de la cama

--gracia-

Fue interrumpido al sentir una gran figura sobre el, jaekyung se inclinó hacia dan comenzando a besar el cuello del castaño

--mngh- j-jaekyung n-no c-creo resistir...

Dijo dan asustado, el azabache grupo y se enderezó levemente

--no te voy a cojer, relajate... Solo emana feromonas.

El mayor hizo caso y comenzó a emanar feromonas, jaekyung gruño de satisfacción y colocó al mayor de horcajadas sobre el, abrazo al castaño escondiendo su cara en el cuello de aquel "porque cojones es tan adictivo" pensó el azabache inhalando en grande y exalando cada pocos segundos solo para obtener su fuente de satisfacción.


𝐴𝑟𝑚𝑜𝑛𝑖𝑎 𝑜́𝑟𝑏𝑖𝑡𝑎 𝑎𝑙𝑟𝑒𝑑𝑒𝑑𝑜𝑟 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝐿𝑢𝑛𝑎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora