Cincuenta Sombras Griegas

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A/N: Bueno aquí va una segunda parte, que no tenia intención de escribir pero de verdad que me lían la cabeza.
Ante todo gracias por la lectura y perdón de antemano por los errores ortográficos y sobretodo Ann no leas esto!!!

Capitulo 2: Cincuenta Sombras Griegas

Se sentía nerviosa, cuando Felipe le dijo que ya se irían de la cena, casi respiro aliviada, sentía a Marie Chantal taladrarla con la mirada, a su suegro, a su cuñada Elena, solo recibía miradas de comprensión de Alexia, la prima de su marido y de su cuñada Cristina con quien las cosas habían vuelto a su cauce.
Pero sobretodo sentía la mirada intensa de Pablo sobre ella y eso le mandaba corrientes eléctricas por toda su espina dorsal.
Miro el reservado encima del restaurante donde la había llevado Felipe, era una estancia bastante lúgubre nada más iluminada con unas luces rojas que poco o nada podía distinguirse, además que todo estaba en Griego y eso era difícil para ella

F: Espérame un segundo y ya vengo cariño
L: Felipe, ¿qué estas tramando?
F: Nada mi amor, solo pasar una velada relajada entre nosotros
L: Pues entonces volvamos al hotel
F: Shhh solo déjate llevar

No pudo contestarle porque lo vio salir y cerro los ojos, ese déjate llevar la acababa de poner cardiaca, noto como alguien deslizaba por sus ojos una venda de satén y después una mano rodeo su cintura, sintiendo un torso musculoso en su espalda y como le soplaban la nuca

P: Felipe tiene razón cariño, solo déjate llevar
L: Pablo- su voz sonó ahogada por la excitación y unió su mano a la de él en su vientre- quiero verte
P: Después, ahora solo disfruta

La giro en el abrazo y la beso, mordiendo sus labios y deslizando las manos por la cremallera del vestido de Letizia hasta dejarla en ropa interior, pegándola a él.

En otro lado, durante todavía transcurría la cena, una muy amigable Cristina, entablaba conversación con la mujer de su primo Pablo, cuando vio aparecer a su hermano que se agachaba a su altura

C: Me quedo sin ideas Pipe y esta un poco impertinente
F: Lo sé, toma- disimuladamente le pone una pastilla en la mano a su hermana- la hará sentirse cansada, llévala a la embajada
C: Felipe!!!- su hermano la miro travieso y dejo muchos besos en su mejilla- no sé como hoy por hoy aún os tapo cosas
F: Nos adoras, sobretodo a mi

Golpeo el hombro de su hermano, que salía de allí riendo y en un momento que Mari Chantal no miraba Cristina diluyo la pastilla en el vaso de la contraria

C: Brindemos querida, mi tio no querría vernos con caras tristes, él rebosaba felicidad siempre

La rubia asintió y choco la copa con la de la prima de su marido, sin saber, lo que le esperaba.

Felipe entro nuevamente en el reservado y observaba desde la puerta como Pablo, recorría con sus manos el cuerpo de su mujer, que tenía la boca entre abierta, soltando pequeños gemidos, eso lo hizo ponerse muy duro. Acorto las distancias y le hizo un gesto a Pablo para cambiar las posiciones y ser él quien estuviera a la espalda de su mujer

F: Veo que la diversión empezó sin mi

Mordió el cuello de Letizia y ella abrió las piernas completamente excitada

L: Esto sigue siendo una locura
F/P: Bendita locura

Ambos se separaron del cuerpo de ella para observarla y Felipe le dio una fusta a Pablo, sonrieron ambos y se acercaron al cuerpo de ella, sintió las manos de ambos hombres sin poder distinguir en aquel momento quien era quien situado alrededor de ella y sus nervios y excitación crecieron por momentos. Felipe fue quien se puso por detrás, atando con una corbata las muñecas de Letizia

Una noche en el BribonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora