Una noche en el Bribon

Perdiendo la razon

Había discutido con Marie Chantal y es que lo último que hacían era discutir y discutir. Estaba harto, harto de ella y de su monotonía. Miro la pulsera en su mano y esbozo una leve sonrisa. Se levanto de su despacho y fue hasta su habitación cogio una pequeña maleta y puso un par de cosas, total, no tenía muy claro cuantos días se quedaría en el destino.

Vio a su mujer entrar en la habitación y alzar la ceja, poniendo los brazos en jarra delante de él;

M.C: Ahora resulta que por una discusión coges la maleta y te vas
P: ¿Una discusión?- soltó una risa irónica- la única que discute en este matrimonio eres tu, que demonios, la única que habla en este matrimonio eres tu

Cerro la maleta y cogio su chaqueta- Pablo si sales por esa puerta vamos a tener un problema grande-, alzo la ceja y negó bufando, se soltó del agarre y sí, salió por la puerta con un destino fijo.

Llego a Zarzuela casi a media noche después de volar en avión privado y subió las escaleras hasta la habitación de sus ¿amantes?, se encogió de hombros y al entrar los observó dormir un momento. Letizia abrazaba a Felipe que estaba casi con medio cuerpo por fuera de la cama y contuvo una carcajada. Se desnudo y se metió por el otro extremo, abrazando a Letizia.

Noto un abrazo y supo enseguida por el tacto de su piel quien era, giro su cuerpo y paso la mano por el pecho de Pablo- descansa-, lo noto cansado y beso sus labios de forma delicada, abrazando su cintura y después su torso, justo en ese momento Felipe se giraba y pasaba el brazo por alrededor de ella, parpadeo porque noto una tercera persona y alzo un poco su cabeza mirando a su primo, sonrió negando y ambos dejaron a Letizia en medio de ellos como de costumbre abrazándola.

Su reloj interno lo hizo despertar como siempre a las seis de la mañana para ir a correr, se levanto despacio, observando como Letizia dormía boca abajo y Pablo tenía su mano diestra en el culo de ella, cogio su movil y les saco una foto, por puro placer. Se cambio de ropa y se acercó a la cama nuevamente besando a su mujer que ronroneaba y después a su primo, se quedo un poco descolocado porque siempre se besaban en medio del sexo pero no en una acción cotidiana y sintió como Pablo lo jalaba- no vayas a correr Flipe-, lo volvió a besar- duerme con ella, tienes cara de agotado-, le susurro suavemente saliendo de la habitación para ir a cumplir su rutina.

Se llevo las manos a la cabeza y a la frente, su hermana Irene, la miraba sin entender que pasaba exactamente-Tranquila Ana María, tu sobrino sabrá bien dónde demonios está Pablo-, no sabía en que pensaba su sobrino favorito, su ojito derecho, siempre tan cabal, como su hermano Constantino pero de un tiempo a esta parte, no hacia mas que comportarse de manera extraña, salió presurosa hacia el pabellón de Felipe.

Se despertó remolona, noto los besos de Pablo en su espalda y se estiro como una gatita, se giro para mirarlo y lo beso, mordiendo su labio- que estes aquí es una locura-, él se encogió de hombros y se puso sobre ella sin apoyar su peso, deslizando los labios por el cuello de Letizia

P: Esto ha sido una locura desde el principio y después de la ultima discusión con Mary Chantal lo único que hacia era jugar con esta dichosa pulsera- levanto su muñeca izquierda y miro la de ella- y solo supe que tenía que venir

Lo escucho y acaricio los pelillos de su nuca, elevando sus caderas y llevando la boca al oido del Griego - cómeme-, su petición no se hizo esperar y sintió como Pablo comenzaba a repartir mordiscos y lametones por su cuerpo, centrándose primero en sus senos, los cuales ya tenían los pezones erectos de la excitación del momento, los chupo con gusto alternativamente y ella sintió el calor y la húmeda entre sus piernas, él seguía repartiendo besos por el cuerpo de ella, enredando la lengua en su ombligo y después abriendo las piernas de ella para tener un mejor acceso, termino de deslizarse dejando un beso en su pubis y un mordisco que la hizo gemir de forma audible.