Código Nerd

Tres: "¿Un baile?"

Estoy de camino a clase. Ayer llegué a casa molida y sin ganas de nada.

Durante toda la noche me he quedado pensando en él.

Llego al instituto y entro. No hay muchos alumnos todavía. He sido una de las primeras en llegar.

Me fui hacia mi taquilla y los alumnos comenzaron a llegar. Mis amigos vinieron directamente hacia mi al llegar y me pidieron detalles sobre anoche. No tenía más remedio que contárselo al pie de la letra, hasta el más mínimo detalle. No les conté lo último que pasó entre él y yo.

Anoche me había jurado a mí misma que si volvía a decir algo sobre mis piernas le iba a pegar.

Mientras contaba, mi mirada se fijo en la entrada. Jackson había llegado con sus amigotes. Todos lo miraron.

Yo le di la espalda e intenté no mirarle.

-¿Short? Veo que hiciste caso a lo que te dije anoche, piernas bonitas -me dijo al pasar a mi lado-.

Abrí la boca y me giré hacia. Lo cogí por los hombros y le di un rodillazo en la entrepierna, lo que hizo que soltara un grito de dolor y se cayera al suelo tocándose ahí.

-Vuelve a hablar de mis piernas y lo siguiente que haré será cortarte los huevos con unas tijeras -le dije-.

Tuve miedo al hacerlo, ya que sus dos amigos se me quedaron mirando con ganas de matarme y Jackson solo se retorcía de dolor en el suelo con la mirada de todo el mundo encima.

El timbre toca, y lo primero que hago es ir corriendo a mi clase. No quiero saber nada de Jackson...

•••

Pasaron las tres primeras horas de clase y ahora mismo estoy caminando en dirección q la cafetería junto a Liz.

Nada más entrar, la mirada de todos se posa sobre mí. Me sonrojo y camino rápido hacia la fila para la comida mientras cojo una bandeja seguida de Liz.

-Desde lo de esta mañana has pasado de ser una invisible a ser la chica que se atrevió a meterse con Jackson Lambert -me dice mi amiga con una sonrisa.-

-Me gustaba ser una invisible... -digo mientras paso hacia donde hay comida y le indico a la cocinera que me pusiera los macarrones con salsa y queso.- Pero se lo tenía merecido, odio que me halaguen de esa manera tan cutre

-Bueno... -empieza a decir mi amiga mientras ella pide la misma lasaña de ayer.- Tendrás que acostumbrarte, porque no siempre es tan malo que te digan que tienes buenas piernas. Lo siguiente será que te diga que tienes un culo perfecto y en su forma -dijo y sentí cómo me daba un azote pequeño en el culo.-

-¡Para! -le digo entre risas mientras pasaba a servirme la ensalada y pillé un zumo de naranja y una botella de agua.-

-Es la verdad -me dijo entre risas también y pilló lo mismo que yo.- Y échate un poco el pelo para atrás -dijo y me echó el pelo hacia atrás.- Estás tapando tus pequeñas -dijo refiriéndose a mis pechos.-

-Tampoco es que quiera que se me vean, gracias -dije pillando también una manzana.-

Terminé de coger comida y nos fuimos a sentar en la mesa, y esperamos un poco y luego aparecieron nuestros amigos con nosotros.

-¡Hey! -saludó Adam sentándose al lado mía.-

-¿Os habéis enterado ya de cuándo será el baile de primavera? La noche de este viernes, ósea, mañana -dice Tim sonriente.- ¿Quién irá?