Mientras se sumergían en la inmersión de los conceptos de pociones, Harry y Draco compartían momentos de cercanía y aprendizaje en el tranquilo salón abandonado. La dedicación de Draco para ayudar a Harry a comprender cada tema era evidente, y Harry apreciaba profundamente su paciencia y apoyo.
En un instante de distracción, los ojos de Harry se desviaron hacia Draco, quien sonreía con ternura mientras revisaba los apuntes. Draco notó la mirada de Harry y su sonrisa se amplió con complicidad. Sin una palabra, se acercó a Harry y depositó un suave beso en sus labios, un gesto cargado de cariño y afecto.
Harry se sintió abrumado por la oleada de emociones que lo invadieron en ese momento. El contacto suave de los labios de Draco contra los suyos lo llenó de calor y felicidad, recordándole lo afortunado que era de tener a alguien tan especial a su lado.
Después del beso, se miraron el uno al otro con amor y gratitud, compartiendo un momento de conexión profunda que trascendía las palabras. En ese instante, el mundo parecía detenerse a su alrededor, dejándolos envueltos en un aura de amor y complicidad que solo ellos podían entender.
Con una sonrisa juguetona, Draco apartó ligeramente su rostro del de Harry después del beso, su tono lleno de complicidad y suavidad.— No te distraigas, cariño— murmuró con un brillo travieso en sus ojos.— Recuerda que mañana tienes el examen de Adivinación.
Las palabras de Draco trajeron a Harry de vuelta al presente, recordándole sus responsabilidades académicas. Asintió con una sonrisa, agradecido por el recordatorio amistoso de Draco.
— Tienes razón— respondió Harry, su voz llena de aprecio.— Gracias por ayudarme a estudiar. No sé qué haría sin ti.
Draco le dedicó una sonrisa cálida y le apretó la mano con cariño.— Siempre estaré aquí para ti— aseguró con ternura.— Ahora, vamos a concentrarnos en prepararte para ese examen.
Con renovado enfoque, Harry y Draco volvieron a sumergirse en sus estudios, cada uno apoyando al otro con amor y dedicación. Sabían que, juntos, podían enfrentar cualquier desafío que la vida les presentara, y ese conocimiento les daba fuerzas para seguir adelante con confianza y determinación
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Draco esperaba pacientemente en el aula, revisando algunos documentos cuando Harry irrumpió en la habitación con un aire de excitación. Levantó la mirada y lo encontró corriendo hacia él, con un brillo de emoción en sus ojos y un papel en la mano.
Una sonrisa se extendió por el rostro de Draco al ver la expresión de Harry. Sabía que el examen de Adivinación era un desafío para él, y verlo tan emocionado lo llenaba de alegría y orgullo.
— ¿Cómo te fue?— preguntó Draco con entusiasmo mientras Harry se acercaba.
Harry se detuvo frente a él, con el papel temblando ligeramente en su mano. Su rostro estaba iluminado por una sonrisa radiante.— ¡Lo hice bien, Draco! ¡Mucho mejor de lo que esperaba!— exclamó, con una emoción contagiosa en su voz.
Draco sintió un estallido de alegría en su pecho al escuchar las palabras de Harry. Se puso de pie y lo abrazó con fuerza, compartiendo su felicidad.— ¡Eso es fantástico, Harry! Estoy muy orgulloso de ti— dijo sinceramente.
A medida que pasaban los días, la relación entre Harry y Draco continuaba profundizándose, y lo que comenzó como una conexión basada en la tutoría y el deseo se transformó en algo mucho más significativo. Para Harry, Draco se convirtió en mucho más que su profesor o su compañero sexual; se convirtió en su refugio, en su apoyo más sólido y en la persona a la que podía recurrir en cualquier momento de necesidad.
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Teacher's pet ‖ Drarry ‖ Completa
FanfictionEn los pasillos de Hogwarts, Draco Malfoy, ahora profesor de pociones, oculta un secreto oscuro: su obsesión por su estudiante, Harry Potter. Mientras lucha por mantener su amor prohibido en secreto, se enfrenta a un dilema que pondrá a prueba su le...