Divinidad

El inicio del Fin - Parte 2.

- Leonardo : Casi no puedo escuchar, me sangran los oídos pero por favor dime que estás bien.

- T : Me encuentro en tu misma situación, pero estoy bien, no te preocupes, ¿qué paso donde estás?

- Leonardo : De repente todo se volvió oscuro y esas malditas cosas empezaron a gritar. Te juro que creía que iba a quedar sordo. Estoy de camino a un bar para ver en la televisión si esto es algo local, nacional o global.

- T : Por favor, avísame de cualquier noticia que tengas, yo voy de camino al aeropuerto.

Me dispuse a montarme en mi auto y retomar mi viaje, prendí la radio y miré mi reloj pero este marcaba la 1:45 PM. En el transcurso de todo lo sucedido no habían pasado poco más de 20 minutos; sin embargo, habían pasado casi 5 horas. ¿Una dilatación temporal tal vez? no lo sé, por ahora mi único pensar era el no llegar a perder mi vuelo mientras buscaba sintonizar la estación de radio de las noticias.

*La estática de la radio suena intentando sintonizar una estación*

- Radio : El testimonio de todo el mundo, incluido el de sus presentes reporteros, es el mismo, oscuridad total con unos seres terroríficos similares a sombras, gritando intensamente. Según nuestras fuentes, este fenómeno se encuentra ya en investigación y ocurrió en aparentemente todo el mundo. A nivel global se reporta una saturación en todos los centros médicos por una aparente ruputura de timpanos, además de una saturación en todas las iglesias. Los creyentes llaman a este fenómeno un presagio del fin de los tiempos. Les pedimos a todos nuestros oyentes por favor guardar la calma y mantenerse preparados para otro fenómeno de este tipo. Los invitamos a estar al tanto y seguir sintonizándonos para más información.

Decidí apagar la radio y continuar mi camino en silencio hasta el aeropuerto. Debido a lo sucedido, no aguantaba el dolor de cabeza, necesitaba un poco de paz.

Una vez en el aeropuerto me dispuse a contactar a Alexander. Básicamente él era mi contacto del gobierno ruso encargado de mi financiamiento y a quien debía responder mes a mes con los avances en mis investigaciones, además, claramente, de ser mi informante sobre mis pasos a seguir cuando me encuentro en un punto muerto de la investigación.

- T : Código AT 1984, estación segura.

- Alexander : Qué gusto escuchar de ti, espero que tus oídos estén bien, aquí en Moscú ya nos levantamos a las armas. En caso de que esas cosas vuelvan, he intenten atacar, jajaja. pero bueno, imagino que ya te encuentras en el aeropuerto, ¿verdad?

- T : Así es Alexander, te contacté para confirmar nuestro encuentro en Stralsund y preguntarte si sabes algo con respecto a lo que pasó.

- Alexander : Creí que tú me darías a mi información con respecto a lo que pasó. Con todo este tema de las tablillas, supuse que algo tendría que ver, pero supongo que eso es algo de lo que hablaremos en unas horas. Una vez que nos veamos en persona, en lo que nos encontramos, intentaré conseguir información al respecto. Ten un buen viaje, estamos en contacto.

Despues de esta llamada procedí a abordar mi vuelo. Fue un viaje tranquilo, sin turbulencia, con un notable aire de preocupación por parte de los demás pasajeros, algo obvio después de lo ocurrido.

Durante el viaje no pude dejar de pensar en lo que me dijo Alexander, ¿y si realmente lo sucedido tenía que ver con las tablillas? durante muchos años fui ateo, pero después de todo lo ocurrido en mis años de investigación con estas, mi forma de pensar comenzó a cambiar, y esto se intensificó aún más después de lo ocurrido hace unas horas. En parte, mi viaje a Alemania se debía a esto. Alexander hace unos meses me informó de que estas tablillas habían tenido su principal descubrimiento en los tiempos de la Alemania nazi. Aparentemente, estos mismos tenían su propia organización interna destinada exclusivamente a la investigación de lo ocultista y lo esoterico con el fin de ganar la guerra gracias a la ayuda de una intervención divina. Este mismo grupo fue quien descubrió la localización de las tablillas del mundo, pero aparentemente, por el fin de la guerra, nunca pudieron llevar a cabo su recolección.