"En mi calle hay un chico precioso que nadie conoce, nunca sale de casa pero por mi siempre está en la calle."
✦- Kazuscara
✦- Historia larga
✦- original
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Día miércoles y estaba realmente aburrido, el gatito se la pasaba durmiendo plácidamente, Y de paso, estaba preocupado por su nuevo amigo, Scaramouche.
Miró al minino y suspiró, tenía pensado ir y invitarlo a salir, pero cómo? era muy difícil teniendo en cuenta que tenía una familia complicada, al menos así lo pensaba Kazuha. Se levantó de la cama a almorzar y seguir procesando sus problemas de la vida. Miró su almuerzo, era mucho, así que debía armarse de valor e ir a pedir salir.
Salió con el puño apretado y una mirada seria, totalmente intimidante, se paró frente a la puerta de la casa y hizo sonar el timbre.
― Quién es? ― Preguntó una voz femenina.
― Kazuha. ―
La puerta luego de varios segundos se abrió y una chica de cabellos rosas salió, tenía unas orejas de zorro que se ocultaban en su precioso y largo cabello.
― Me gustaría invitar a Scaramouche a comer. ―
La mujer se mostró inexpresiva, pero sonrió y entró a la casa. Pasados 3 minutos salió el chico de hebras moradas, con una polera larga que cubría hasta sus delgadas piernas, junto unos calcetines blancos que se conjuntaban a la polera.
― Ve, ve, juega con tu amiguito. ―
Ambos se adentraron en la casa de Kazuha y quedó la pelirosada mirando desde la puerta, luego ese adentró en la cocina para mirar a su mujer.
― A donde fue ese niño? ― Preguntó la pelimorada.
― Salió con un amiguito suyo, no sabía que tenía amigos. ―
― Da igual, que haga lo que quiera. ―
En la mesa, estaba la pequeña niña, comiendo su sopa con felicidad mientras agitaba sus piernas en el aire.
― Kato.. ¿Kato? ―
― Por cierto, donde está ese gato? ―
― Shogun lo extraña, extraña jugar con él, luego se lo diré a Scaramouche. ―
Mientras, en la casa de Kazuha, estaba el pelimorado mirando a la nada mientras esperaba a que el arroz se calentara, Kazuha permanecia en la cocina lavando platos y echando a la olla unas carnes con verduras.
― Te gusta la carne, no? ― Scaramouche asintió.
El albino sonrió y echó una porción de carne extra, tenía dudas de que verduras le gustaban al menor, lo miro y pensó "en ese estado, tal vez come lo que sea", así que echó unas verduras extras y comenzó a revolver con los palillos.
Un olor increíblemente delicioso inundaba la sala, el menor en su mas fuerte resistencia, apretaba sus puños evitando apresurar al mayor, se mordía el labio y estaba al borde de llorar.
Antes de caer en la locura, un plato de deliciosa comida se sirvió frente a él, sus ojos se iluminaron y Kazuha juró ver estrellas, se sentó junto a Scaramouche y lo miró unos segundos.
― Sucede algo? ― Le sonríe de manera amistosa, acercándole la cuchara a la mano.
― Yo.. merezco comer esto? ―
En su mirada se notaba las ganas, pero no podía permitirse comer algo así tan fácilmente.
― Si, si puedes. ― Sonrió, mirando su comida.
El chico de hebras moradas miró el plato, luego de unos minutos comenzó a comer con torpeza.
Kazuha sonrió mientras observaba al menor comer, sus dudas comenzaron a surgir ¿Por qué no merecería comer?, se sintió triste, ¿por qué no lo dejarían comer en casa?, suspiró y para cuando termino de pensar, su comida estaba fría.
― Ow.. ― Sonrió un poco apenado.
― Se enfrió.. calientalo. ― Sugirió el menor, Kazuha le miró con preocupación.
― Por qué no merecerías está comida? ―
Scaramouche se quedó en silencio, miró al piso como si fuera un perrito taimado. Kazuha se encargó de levantar su cabeza desde la barbilla con la mano, sonriendole y acercándose a él.
― Tranquilo. ― Acarició suavemente su mejilla. ― Todo estará bien, yo te voy a proteger.. ―
― Tú.. protegerme.. ― Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, Kazuha se levantó del asiento y lo abrazó.
Con piernas y brazos Scaramouche comenzó a llorar desconsolado en los brazos del mayor, se apegó a él. "Juro protegerte, Scara" fueron las palabras que quedaron marcadas en la mente del de hebras moradas.
Luego de un tiempo el menor miró al mayor, Kazuha sonrió viendo su polera completamente mojada de lágrimas, Kazuha sw lo pidió y Scaramouche se levantó, fue a sonarse y lavarse la cara, quedando como nuevo, un hermoso muñequito.
― Juras protegerme? ― Volvió a repetir.
― Si, lo juro. ―
― Gracias.. ―
Mientras Scaramouche sonreía Kazuha se quitaba la polera y se cambiaba, dándole una vista de su cuerpo al menor.
― Qué haces?! ―
― Tú mojaste mi polera, me voy a cambiar. ―
― ¡¡Maldito desvergonzado!! ―
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