Obsessed

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Luego de la batalla contra los exorcistas y la construcción del nuevo hotel, decidí hospedarme en el hotel para proteger a mi hija. Conociendo como son en el Cielo, deben estar furiosos por la muerte de Adán y probablemente están considerando exterminarnos a todos, incluyéndome.

Hoy era un nuevo día en el infierno, baje a la sala de estar, observe a todos empezando con sus actividades; ya que había pasado al rededor de tres meses desde el suceso con los ángeles, para mí ya era rutinario ver a estos pecadores todos los días. Antes de empezar con mis propias actividades deseaba desayunar, entonces fui a la cocina y aparecí un desayuno básico: huevos con frijol. Aunque la comida hecha sin magia es mucho mejor y más deliciosa, mi pereza es más grande que mis ganas de cocinar.

Termine mi desayuno, saque mi lista de deberes que era ver si había correspondencia enviada por el cielo, ver la cantidad de almas nuevas en el infierno dependiendo los anillos y actualizar el número de población. Usualmente no hacía todo, específicamente ver la correspondencia, así que decidí volver a la sala encontrándome con el chico araña del cual me olvidé su nombre.

El chico veía su celular con desinterés y aburrimiento, deslizando su dedo en la pantalla. No fue hasta que se dió cuenta que lo estaba observando que apagó su teléfono para luego reincorporarse en el sofá, sentándose con las piernas cruzadas con una cara un tanto...¿seductora?

-Buenos días su majestad, ¿Qué se le ofrece al malote del infierno?-pregunto con una voz lujuriosa, este tipo de demonios me provocaban cierto asco, pero quería conversar con alguien.

-Simplemente me gustaría charlar.-dije con un tono para demostrar mi rechazo a cualquier intento de seducción.

El rápidamente cambio su postura a una más relajada y su rostro paso a uno más amigable.-Bueno, aún no empiezan las actividades del día y estoy aburrido de la mierda en internet, entonces sería un placer charlar con usted-respondió con tranquilidad, así dio inicio a una conversación amena.

Este chico es Angel Dust, o dijo que así es como lo conocen en la industria de la actuación, pues trabaja como actor porno para un idiota (a palabras de Angel), le pregunté sí le gustaba su trabajo y me confeso que no, pregunté la razón del porque no renunciaba a ese empleo sí lo odiaba tanto, note su incomodidad sobre el tema así que intente cambiarlo pero el decidió responder.

-Estoy bajo contrato y no tiene una salida

-¿Qué no todos los contratos tienen una salida o vacío legal?- Pregunte nuevamente, me parecía un hecho curioso, en los primeros siglos del infierno recibia toneladas de documentos sobre contratos y cada uno de ellos tenía una forma de invalidarlo o romperlo, tal parece que no lo note; hubo un tiempo en el que Lilith se encargo de hacer esa revisión y resolver asuntos en los demás anillos del infierno, me aleje del papeleo por mucho tiempo incluso cuando...incluso cuando ella ya se había marchado.

-No todos los contratos los tienen, encadenan tu alma para cuando no hagas lo que ellos quieren puedan asfixiante como sí fueras un perro.- Su tristeza y enojo eran faciles de notar en su mirada, me siento un tanto culpable por ausentarme de mis responsabilidades tanto tiempo como para llegar a esto. Y el hecho de que otro pecador puede tratar así a otra alma humana de esa forma, sonaba terrible y solo me daba más razones para pensar en que estos pecadores son terribles personas, pero sin importar que, seguiré apoyando el sueño de mi hija.

De un momento a otro, la conversación paso de contratos a drogas y pociones. Angel me contó sobre los afrodisíacos, había escuchado el término en una fiesta de Asmodeus donde comento su disgusto por el mal uso de este, realmente no presto mucha atención porque no sabía muy bien de que se trataba. Y ahora lo entiendo, lo usan como una droga para prostituir, violar y abusar de la gente.