Mundo abierto.
Cuidando a Wandy enfermo. 🤺
ฅ^•ﻌ•^ฅ
Kazuha y Heizou estaban preocupados por Wanderer, quien parecía estar sufriendo por la fiebre que lo había atacado de repente. Kazuha se acercó a la cama donde el índigo yacía acurrucado entre las mantas, su rostro pálido resaltando sus ojos morados que brillaban con un brillo febril.
- Creo que tienes fiebre, estás muy caliente - dijo el albino de visión anemo luego de haber tomado la temperatura de su chico.
- Imposible, yo no me enfermo nunca - el índigo dijo con cierta molestia en un intento de levantarse de la cama si no fuera que cierta pequeña de visión dendro lo detuvo antes de que pudiera ponerse de pie.
- Claro que es posible, Wanderer. Estás incluso demasiado caliente y te noto los ojos brillosos - regañó con algo de preocupación tocando la frente de Wanderer con delicadeza notando lo caliente que estaba este.
- No te preocupes, Wandy. Nosotros tus novios te podemos cuidar si nos permites de mientras que Nahida se ocupa de sus asuntos - el pelirrojo que había estado todo ese tiempo en el umbral de la puerta habló esta vez acercándose a la cama donde descansaba el enfermo.
- Primero, no me llames por ese estúpido apodo, y segundo no necesito que nadie me cuide - se cruzó de brazos el de tez pálida manteniendo su ceño fruncido luego de haber escuchado el tonto apodo que Heizou le había puesto hace unos días atrás.
- De hecho no estaría mal que los dejara a ambos a cargo del cuidado de Wanderer, prometí al viajero acompañarlo a investigar unos puzzles en el desierto que hallo esta semana - habló la de visión dendro colocándose su dedo índice en el mentón de modo pensativa - Me preocupa tener que dejarte solo por muchas horas teniendo fiebre. Viniendo de ti me preocupa que salgas así a la calle - se cruzó de brazos mirando al de cabello índigo como si lo estuviera regañando por su falta de responsabilidad con su salud.
- Estamos dispuestos a cuidar a Wanderer el tiempo que sea necesario, Nahida - el albino dijo con una sonrisa demostrando lo dispuesto que estaba en cuidar a Wanderer durante la ausencia de la mayor - No tienes que preocuparte por nada, tú ve y diviértete con el viajero mientras nosostros nos hacemos cargo de Wanderer.
- Te prometemos que estará en muy buenas manos - le siguió el pelirrojo acariciando el cabello del índigo, quien los estaba mirando como si quisiera matarlos con la mirada a los tres por estar tomando sus propias decisiones sin su consentimiento.
- ¡Yo soy el que debería decidir es...-
- Está decidido, Kazuha y Heizou se quedarán a cuidarte mientras que yo acompaño al viajero a investigar los puzzles - afirmó la arconte decidida sin importarle realmente las quejas que tendría luego de Wanderer. Si hubiera sido otra persona definitivamente no lo dejaría al cuidado de Wanderer, pero sabía que Heizou y Kazuha eran lo suficiente responsables y cercanos a la marioneta como para dejar que cuiden de ella durante su ausencia.
- ¡Pero..-
- Tranquilo, cariño, te cuidaremos como si se tratará de un príncipe - el albino dijo en un intento de calmar al índigo, lo cual raramente pareció funcionar cuando Wanderer calmó sus tensas facciones.
- ¡Entonces no se diga más!
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Luego de ciertas indicaciones que Nahida les hubiera dado para que sepan como cuidar a Wanderer esta se marchó de la habitación. Aunque para ser honestos no creían que cuidar al índigo fuera tan difícil, suponían que solo era una fiebre normal y ya, nada del otro mundo.
