El chico sabía que esta sería su última batalla, la confrontación definitiva contra Dios. Actuó con rapidez, abriendo un nuevo portal y golpeando a Dios en la cara antes de que este pudiera reaccionar. Lo lanzó hacia el cielo y lo golpeó repetidamente, creando un cráter con cada impacto. Aunque nervioso por el resultado, el chico estaba decidido a vencer.
Dios se recuperó y se involucró en la pelea, teletransportándose detrás del chico para atacarlo. Sin embargo, el chico lo anticipó y lo levantó con fuerza, lanzándole una lluvia de bolas de energía. Intentó tomarlo, pero Dios fue más rápido y se teletransportó. El chico corrió hacia él y lo golpeó con fuerza, enviándolo al suelo.
Con una idea en mente, el chico abrió un portal hacia el espacio y lanzó a Dios hacia el sol. Sin embargo, el sol no logró dañarlo. Determinado, el chico lo llevó hacia un agujero negro, pero Dios lo cerró antes de que pudiera arrojarlo.
Decidió entonces hacer a Dios intangible y lo atravesó, congelándolo instantáneamente. Intentó romperlo, pero sus ataques apenas lo dañaron. Sin embargo, el chico cambió la presión atmosférica, sometiéndolo a una presión extrema, pero apenas logró herirlo.
Decidido a encontrar una forma de derrotarlo, el chico lo enfrentó con una explosión masiva, resultando en un enfrentamiento cuerpo a cuerpo que los dejó gravemente heridos. Aprovechando la oportunidad, creó una burbuja dentro del cerebro de Dios y lo hizo explotar.
Se dio cuenta de que la única forma de matarlo era borrar su existencia. Usando un poder que sabía que sería útil, borró la existencia de Dios, terminando con su amenaza de una vez por todas. Luego, borró la línea temporal en la que habían luchado y creó un nuevo universo perfecto para él y su compañera.
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El otro
Science Fictionen un nuevo reinicio universal aquel hombre con el poder de un dios busca a un contrincante digno y espera que el nuevo chico pueda darle lo que desea