Capitulo 25

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Los aires se sentían tensos últimamente Marvolo fue a la construcción todos los días con Yarel el único que los acompaño de vez en cuando fue Lucius Malfoy . Eran momentos difíciles cabe recalcar la muerte de Corvus la partida de Cassian la estresante vida familiar de los gemelos Lestrange todo estaba un poco fuera de lugar. Yarel prácticamente pregunta por su papá Cassian y Marvolo no tenía respuesta simplemente ignoraba dicha pregunta sobre todo por qué el mismo se sentía confundido eran sentimientos extraños sentir la perdida la culpa y el sentimiento de abandono todo en uno así mismo la decepción de su propia parte una duda mental acerca de su condición que hasta el momento solo Régulus y Severus tenían dicha información.

Abortar siempre ronda sus pensamientos pero honestamente se queda viendo a Yarel un niño que nació por arte de magia ya que Marvolo no tenía pareja en ese entonces y este nuevo bebé el cual fue hecho por dos personas hablando físicamente. ¿Debería tenerlo? Es decir ¿Debería el?.

Pero de nuevo ignora su propia confusión sentimental a favor de pensar en lo que siente por Cassian el hombre se fue molesto y probablemente herido también y fue culpa suya admite que quizás fue un poco cruel en no responder sus sentimientos en voz alta pero no se culpa totalmente si no a su vida dura y confusión.

Cassian se fue hace cuatro días , cuatro días con nubes grises y tiempos difíciles se consuela en saber que no es el único que la está pasando mal.

Marvolo definitivamente no la está pasando mal es un hombre adulto con una vida hecha muchas cosas en la cabeza un gran amigo acaba de fallecer no puede seguir pensando en mal de amores tiene un gran proyecto que cumplir Cassian puede esperar el bebé dentro también puede esperar .

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–¿Severus a dónde vas?

–A la panadería

–¿Y Kreacher dónde está por qué no va el?

Severus dejo la cesta de mimbre dónde iría a traer el pan miro a su marido detenidamente

–Kreacher está limpiando también lo envíe hace rato por algunas cosas pero ahora quiero pan caliente he decidió ir yo– responde

–No es necesario bebé puedo ir yo– Régulus toma su abrigo de inmediato no quiere que su esposo ande solo ahora como está mucho más vulnerable de lo que ya estaba a su esposo le costaba caminar por el peso extra de los tres bebés dentro de el.

–O podemos ir los dos

Régulus asiente tomando la cesta de mimbre en sus manos y con su mano libre toma la mano de severus ambos toman la chimenea juntos Régulus guía el camino usando su cuerpo como barricada para que nadie choque con su esposo  a severus le causa gracia todo honestamente llegan a la panadería severus ya tiene lo que va llevarse lo dice al tendedero el hombre asiente a la lista larga y va sumando todo a la cesta de severus

–Diex galeones

Régulus abre la boca diez es mucho para comprar simple pan pero duda en reclamar al ver la cesta repleta y su amado ya mordisqueando un pan caliente severus lo está mirando esperando a que diga algo al respecto sabiamente Régulus paga y salen de la tienda no tomaría tanto tiempo aún así Régulus no quería que fuera solo.

–Ya que estamos aquí pensé que podríamos comprar batido de frutas

–Si, está bien podemos comprar – una vez que severus devora el batido y unos cuatro panes tibios lo mira con atención –¿Que pasa?

–¿Que tal si conseguimos unos dulces de naranja?

–Hmm si, está bien honeydunkes

–Si por favor– severus sonríe suavemente

Los señores oscuros también sienten Donde viven las historias. Descúbrelo ahora