𝑨𝑪𝑶𝑴𝑷𝑨Ñ𝑨𝑵𝑻𝑬 || 𝑲𝑴

CAPÍTULO 07

Jimin

No esperaba que cediera tan fácilmente. La forma en que me miró hace un momento me hace temblar un poco y no entiendo por qué. Hay algo sucediendo en su mente que no puedo identificar.

Luego está la enorme atracción física que siento hacia él y que me incita. Me está empujando a hacer cosas que normalmente nunca consideraría. Como acercarse a él y besarlo en los labios. Tengo tantas ganas de hacerlo que empiezo a sentirme un poco sonrojado.

Pero no lo haré.

Tenemos un contrato y un trabajo que hacer. Cuando termine, tomaremos caminos separados. No es necesario complicar las cosas más de lo necesario.

Necesito asegurarme de que Jungkook esté conmigo en esto.

La forma furtiva en que sigue mirándome me hace pensar que ya está planeando encontrar una manera de escabullirse de mí.

Me levanto del sofá y me muevo para pararme a su lado. La vista desde aquí es preciosa. No es de extrañar que apenas haya dejado de mirar por la ventana durante todo el tiempo que he estado aquí.

— Estamos en la misma página, ¿verdad? —  Le pregunto, colocando una mano en la ventana y mirándolo con curiosidad.

— No vamos a tener problemas, ¿verdad?

— Sólo si sigues dándole mucha importancia", dice Jungkook, mirándome levemente. — No tienes que cuidarme. Yo te contraté, ¿recuerdas?

— Pero si saboteas esto, entonces no recibiré el resto de mi cheque. —  le recuerdo.

Al principio, parece que Jungkook va a discutir conmigo, pero su expresión rápidamente se suaviza cuando su mirada se dirige hacia la ventana.

— Me pregunto… — dice después de un momento.

— ¿Eres cosquilloso?.

— ¿Qué?. — Antes de que pueda terminar ese pensamiento, me toma entre sus brazos y sus dedos recorren mi torso con un movimiento como de garras.

— ¡N-no, detente! — Grito mientras golpea el punto que me hace cosquillas en las costillas.

Mis protestas se ahogan en un mar de risas mientras intento liberarme de sus garras.
Después de un momento de lucha, logro alejarme de él. Se lanza detrás de mí con una breve risa.

Corremos por el apartamento con Jungkook pisándome los talones. Si no fuera por los obstáculos y el hecho de que ninguno de los dos quería derribar nada, habría podido atraparme sin siquiera sudar.

— Jungkook, detente. No tenemos tiempo para esto. — Me río cuando me encuentro en un rincón contra las ventanas sin ningún lugar a donde correr.

— Disparates. — Jungkook se acerca a mí con una sonrisa en su rostro. — Tenemos un montón de tiempo. — Se detiene a sólo unos centímetros de distancia y presiona una mano contra el cristal de la ventana.

Me acurruco en un rincón y me obligo a reír.

— Parece que me atrapaste. —  digo mientras trato de ignorar la sensación de revoloteo en mi estómago. — ¿Ahora que? — La mirada en sus ojos es embriagadora y llena de necesidad. Él me desea con todas sus fuerzas y puedo sentirlo en la boca del estómago. Lo quiero tanto.

Estoy tentada a ceder y dejar que me tenga. Esta misma escena ha sido objeto de muchas de mis fantasías nocturnas desde hace mucho tiempo.

Jungkook baja su rostro hacia el mío y siento el calor de su aliento contra mi piel.

Se me pone la piel de gallina en la nuca y los pezones se ponen rígidos debajo de la camisa. Mi piel todavía está sonrojada por la persecución, pero incluso si no lo fuera, ahora estaría sonrojada.