‡Por Sukuna‡

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Narración normal:

De la prestigiosa escuela de hechicera Jujutsu, se gradúan muchos de los mejores hechiceros de todo Japón, tanto profesores como alumnos son hechiceros poderoso. Quizás no había muchos alumnos pero los que tenían eran de los mejores.

Entre las paredes de esta escuela se formaron estudiantes hechiceros de alta categoría, entre ellos tres específicamente; Kugisaki, Fushiguro e Itadori, los últimos dos tenían una relación romántica desde finales del primer año, había sido una sorpresa para todos, sobre todo por la parte de Megumi.

Se habían graduado como hechiceros de grado especial y ahora vivían juntos en un departamento muy cerca de la escuela.
Aún con eso iban a la preparatoria para ayudar en las clases.

En estos momentos era fin de semana, la pareja se encontraba en la habitación del recipiente de Sukuna, no estaban haciendo nada en específico, estaban acostados uno encima del otro.

-Oye Megumi ¿Hiciste la tarea? -pregunto sin mucho interés el de cabello rojizo

-¿Qué tarea? -contesto confundido

-el profe Gojo dejo una tarea de no se que cosa de historia, nos pidió que investigaremos para exponer a una clase

-el nos pone a hacer su trabajo...¿La hiciste? -solo recibió una señal de aprobación con la cabeza -¿me la pasas?

-claro, está en mi mochila

-ire a hacerla en mi habitación -se levanta de su lugar y se dirige a buscar la libreta de su novio -¿Es esta?

-¡Si! Ven despídete antes de irte -extiende los brazos como si pidiera un abrazo

-¿Que eres un niño? Solo voy a mi habitación- se acerca para besarlo -si termino rápido regreso -se da la vuelta para salir de la habitación pero escucha una voz extra

-¿No hay beso para mí?

-tu pudrete -sale del cuarto

-¿Puedes dejar de coquetear con mi novio?

-"nuestro" ¿Encerio crees que eres el único que se lo coge?

-no digas idioteces

-analizalo niño, compartimos cuerpo y cuando disfruta de verdad no es por tu pito

-sabes que no te voy a escuchar, di lo que quieras

Aunque le costara admitirlo sabía que varias veces en las que había tenido intimidad con su novio la maldicion habia estado presente y no solo eso, sino que también había interactuado en el acto.

Lo descubrieron cuando encontraron una mordida en los muslos del peli negro, mordida que no solo Itadori no había podido haber echo porque jamás acerco su boca a esa zona, también era una mordida que se había realizado con afilados colmillos.

Por cierto si quedo duda, a pesar de vivir juntos tenían una habitación para cada uno, era la forma de darse espacio.

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Los días pasaban con normalidad, justo ahora habían mandado a la parejita a una misión de bajo rango, no era porque creyeran que no eran capaces, al contrario, sabían el potencial de cada uno y sobre todo que eran imparables juntó, pero los habían mandado porque nadie mas quiso ir.

-esto es algo patético -hablo frívolo Fushiguro

-si un poco... ¿Qué te parece si al acabar vamos a pasear? Esto será muy fácil -sugirió su novio

-si creo que es justo -utilizando su técnica de perros guardianes comenzaría con su "tarea"; sin embargo al momento de que los dos perros aparecieron uno se mantuvo al lado del pelinegro -¿A ti que te pasa?

-creo que no se quiere separar de ti

-wow... No lo habia notado dijo sarcástico oye ve a pelear, quiero irme ya

-oww se preocupa por ti se intentó acercar a su novio pero el espíritu comenzó a gruñirle

-¡Hey! Encerio que te pasa, estás muy raro, llega a ponerse así cuando son maldiciones de alto rango, pero ¿Esta? Además a ti te aman

-¿Será por Sukuna?

-lo dudo mucho -se escucho una pequeña explosión y seguido de eso salió el perro que había ido a atacar -parece que eso es todo, vámonos ya y al dar la vuelta e intentar dar un paso callo en brazos de su novio

-¡¿Estás bien?!

-si... Fue solo un mareo... Creo que me voy a enfermar, es la segunda vez está semana

-podríamos ir con la señorita Shoko, es raro eso en ti

-tranquilo estoy bien, vamos al parque y descansamos un rato

-vale...

-ellos están bien

-¿Qué? Pregunto confundido por la voz dentro de el

-yo no dije nada

-no tu no cariño, Sukuna dijo pero... No lo escuché bien

-ven toma su mano vamos a descansar ya, tengo ganas de un helado

-vale ¡busquemos ese helado!