Mi Tatuador Es Un Mafioso.

Capítulo 15.

Yoongi se encontraba acostado mientras acariciaba la mejilla de Jimin, quien estaba dormido tan profundamente lleno de marcas y mordidas que eran bastante notorias, veía al menor con detenimiento y por primera vez sentía miedo, miedo de perder a Jimin, que le hicieran algo y más ahora que tenía un bebé en espera, tal vez llevaba poco tiempo, pero ya lo consideraba como un bebé.

Toda su vida solamente se dedicaba a matar, secuestrar personas y amenazarlas, golpear gente, nunca pensó que un chico de 18 años llegaría de la nada a conquistar su corazón y hacerlo papá de un día para otro, todo eso sucedio tan rápido y eso fue lo que más le impresiono e incluso se gano el respeto de sus guardaespaldas por lo bien que sabía pelear, también era de esperarse, era el hijo de Minjin y ella también es buena con los movimientos de pelea, eso nunca se debe dudar. Yoongi quería que terminara sus estudios y no cayera en lo mismo que él, sin embargo, era algo inevitable ahora, un día irá a la escuela con su panza redonda y todos se preguntarán el porqué, lo juzgarán y mirarán mal, lo van a dañar emocionalmente y es algo que quiere evitar a toda costa.

Jimin se movio un poco y después abrio sus ojos despacio encontrándose con los de Yoongi, sonrio levemente acariciando la mejilla contraria para luego dejar un beso en esta pero sus labios fueron besados rápidamente por Yoongi riendo. El mayor se levanto para agarrar a su ahora pareja y lo llevo al baño para que ambos se bañaran juntos, después de varios minutos terminaron y Yoongi vistio a Jimin, pues el pobre ni siquiera podía moverse del dolor. Una vez listos bajaron tranquilamente hacía el comedor donde se encontraban casi todos, cuando llamaron la atención, el pequeño Doyun fue rápidamente a abrazar a Jimin quien al instante lo cargó correspondiéndole el abrazo.

— ¿Nadie pudo dormir bien?

Todos negaron mientras miraban a ambos con mala cara, de verdad estaban enojados y con sueño, menos Jungkook, él solo veía a Tae como un estúpido enamorado. Cuando ambos se sentaron la madre de Yoongi les dejo el desayuno, todos se sorprendieron porque jamás la vieron bajar ni pasar a la cosa ni en ningún momento, y cuando ella se percató, sus mejillas se sonrojaron levemente y regreso a la habitación donde había dormido, habitación donde estaba Minjin.

— Tu madre, ¿se sonrojó?- Hablo Jungkook confundido mientras tomaba su café.

— No la ví, pero sería extraño, parece no tener sentimientos y menos mi padre.

— Yo tengo sentimientos.- Hablo Youngsoo mientras leía un periódico y tomaba su café.

Yoongi se atragantó con la comida que tenía mientras los demás se sorprendieron, ¿en qué momento había llegado? Jimin miraba atentamente al mayor Min, quién al darse cuenta miro al menor recibiendo una sonrisa por parte de éste, sonrisa que hizo que se sonrojara levemente y tapo su cara con el periódico como si estuviera leyéndolo.

— Yoongi.

— ¿Sí?- Continuaba comiendo mientras agarraba la mano de su pareja.

— Quédense a vivir aquí tú y Jimin.

Todos se volvieron a sorprender menos Jimin y Yoongi nuevamente se volvio a atragantar, ¿por qué eso de la nada? Jamás había tenido buena relación con su padre, es más, era una relación tan ausente que parecía que solo eran conocidos, jamás vio a su padre sonreír, ni decir más de 3 palabras, era un hombre serio y formal siempre. El señor solamente hablaba mucho cuando de trabajo se tratara y por supuesto cuando regañaba al menor de los Min, tenía confianza en su hijo pero quería que desarrollara más su potencial y que no solo quisiera matar gente.

El desayuno transcurrio con normalidad hasta que Youngsoo se levantó, llamo la atención de los que se encontraban ahí y se retiro de la mesa pero cuando estaba por subir, llamo a Jimin quién confundido asintio y se fue directo hacía el señor Min, ambos subieron hasta una habitación donde primero entro el menor y después el mayor. Una vez la puerta estuvo cerrada, todos los de la mesa fueron rápidamente a escuchar su conversación.