La misteriosa Kitsune

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En un castillo de un reino muy lejos de la pequeña aldea donde se conocieron nuestros amigos se esta provocando un enorme alboroto

-La Miko kitsune se ha escapado- gritó un hombre entre la oscuridad mientras velas y lamparas encendidas se movian por todos lados

-RAPIDO HAY QUE ENCONTRARLA, NO PUEDE HABER HIDO LEJOS-

-SI SEÑOR- Respondian muchos soldados al unisono

Entre las sombras de los arbustos y arboles del patio central una joven kitsune de cabello anaranjado cubierta de una tunica oscura se movia con agilidad y silencio para que no la detectaran

-RAPIDO EL GRAN SACERDOTE LA NECESITA CON VIDA-

-Tengo que salir cuanto antes- Dijo la joven -Pero necesito el talisman de portal para poder uir lo mas lejos posible de este reino- Mientras decia esto un joven soldado dirigio la mirada a su ubicacion y apuntando con una linterna la encuentra

-AQUI ESTA- Gritó -RAPIDO VENG...- Antes de terminar de hablar un kunai atravesó su garganta

-Debo moverme mas rapido, no tengo muchos talismanes- dijo mientras revisaba en su cadera, donde se apreciaba solo 7 talismanes sobresaliendo del obi de un kimono.

-¡¡HEY POR AQUÍ HAY ALGUIEN EN EL SUELO!!- Otro soldado se aproximaba a la ubicación de nuestra chica.

-¡Rayos!- Dijo mientras saltaba sobre un arbol y después sobre un muro -Debo escapar ahora-

Al cabo de un rato huyendo finalmente llegó a una santuario

-Al fin, aquí debe estar- Dijo mientras se adentraba en el santuario estando dentro se acercó a una estatua de una figura con forma de zorro con nueve colas el cual estaba con velas e incienso a sus pies y en el hocico un espacio vacío -¡¿Que?!, ¡debería estar aquí!-

-Hola Gumiko ¿buscas esto?- Una voz femenina resonó desde la entrada del santuario, ella al voltearse vio otra miko como ella, un poco mas delgada y de menor estatura, su cabello era de color negro y su kimono era blanco con rojo, además en una de sus manos tenia un papel el cual tenia la apariencia de un talisman.

-Ranko ¿que haces aqui?- Dijo la Guniko sorprendida -Dame ese talisman es la unica forma que pueda salvarnos-

-Diras salvarte-

-¿Como?-

-Gumiko, sabes lo que nos hará el gran sacerdote si te escapas, nos torturará hasta que digamos donde estas y luego a la confiese la matará tu no puedes irte-

-¡Ranko, el quiere usarme de sacrificio!-

-Y tu sacrificio nos liberará a todas-

-¡Mentiras!, ni siquiera sabemos si realmente yo soy quien dice el que soy- Dijo Gumiko con voz desesperada -Ademas una diosa me hablo en sueños diciendome que busque a un joven Oni, que el nos salvará-

-¡Gumiko escuchate!- Le respondió la otra miko -Los oni se extinguieron hace mucho tiempo-

-¡¿Y que tal si aun queda uno?!- Exclamo Gumiko ¡así que dame ese talismán para eso ir a buscarlo!- Dijo mientras se abalanzaba sobre ella

-¡AQUÍ ESTA LA MIKO FUGITIVA!- Grito la otra sacerdotisa mientras trataba de esquivar a Gumiko, en ese intante una flecha atravesó el cuello de la chica

-Noooo Rankooo- Grito mientras abrazaba a su compañera

-P... Por... Porque... yo- Decia apenas entre vomitos de sangre -T... tu... n... nos ma...taras... a toda...- Termino diciendo con su ultimo aliento.

-AQUI ESTA CON UNA COMPLICE- Un grito de un guardia se escuchaba a la distancia

-Perdoname Ranko, juro que te vengare- Dijo Gumiko mientras dejaba a su compañera en el suelo y tomaba el talisman, luego de eso cerró las puertas del santuario y las selló con uno de los talismanes que tenia guardados, luego de eso con el otro talismán procedió a abrir un portal con forma de puerta japonesa -Más vale que existas último Oni- Luego de decir eso atravesó la puerta y se fue.

Me reencarne como el ultimo OniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora