Chapter nine: The destiny.

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La paz de ver a Jeongin vivo, a escasos metros de distancia, le llenaba el cuerpo entero. No quería hacer más que ir a él para abrazarlo y decirle lo mucho que lo extrañaba; ese amor inexplicable que nunca le pudo brindar a Minho ahora pedía salir de su pecho al reencontrarse con aquel que se apoderó de su vida y que de la misma manera desapareció de ella. Con pasos torpes dio dos hacia enfrente deteniéndose en seco.


Jeongin no se había dado cuenta de su presencia; había muchas personas observándolo como para siquiera poder identificar alguna en especial. Estaba acompañado de Christian y parecía hablar con una chica un poco más baja que ambos, cabello rojizo y piel morena; Jeongin parecía reír con una pequeña molestia invadiendo su rostro. HyunJin no era capaz de escuchar la conversación, pero sí de identificar las emociones del, ahora, pelinegro; su cabello era un poco más largo de lo que habitualmente se lo dejaba crecer y unos pequeños rulos se formaban a la mitad del largor.


— ¡Hwang! — Esa voz interrumpió su mirar enfocado en Jeongin. — Creí que no vendrías.
           Christopher se acercó él tomándolo por los hombros en una clase de abrazo y de la misma manera, con un movimiento rápido hizo que volteara al lado contrario, justo enfrente de su auto. HyunJin casi cae al suelo por la fuerza y rapidez con la que su amigo lo tomó, sin embargo logró mantener el equilibrio evitándolo.
— ¿Por qué lo creías? Obvio que iba a venir. — Rió suave antes de soltarse del agarre.
— Por Minho... Me comentó que hoy era-...
— Esto es más importante.
          Al escucharlo, Christopher tragó fuerte y suspiró viendo a HyunJin directamente a los ojos.
— Hyun... sabes que te aprecio, eres como un hermano para mí y por eso hice esto. — Dejó unos segundos de silencio antes de volver a tomarlo de la misma manera  haciendo que caminaran unos pocos metros lejos del bullicio. — La vez que nos encontramos en esa fiesta, Minho se veía tan feliz a tu lado, tú también lo parecías. Cuando me preguntaste por Jeongin pensé en mentirte y decirte que no sabía quién era, pero no podía hacerle eso a la persona que considero mi hermano.
— Y te lo agradezco, Chahn. Pero esto ya no debería por qué interesarte.
— Dijiste que con verlo estarías bien y podrías seguir con tu vida, ¿no? Ya lo viste, ahora regresa a casa y lleva a Minho al restaurante que le prometiste.
— No puedo, necesito... — Suspiró pesadamente. — Necesito escucharlo... tenerlo cerca.
— Minho también te necesita.
— Me importa poco. No lo amo.
— HyunJin, no puedes decir eso. Se van a casar.
— No, ya no. Él siempre lo supo, todo este tiempo lo supo y jamás me dijo nada, es un maldito mentiroso.
— Todos lo sabíamos, todos te mentimos.
          HyunJin mantuvo la mirada en la nada evitando a toda costa los ojos de su mayor.
— Deberías hacerlo, te lo digo en serio. Jeongin siguió con su vida, tiene una hija y está feliz. Lo correcto sería que hicieras lo mismo.
— ¿Una hija..?
— Ujum, una hija, Hyun.
          El rubio se quedó en silencio pasmado por la confesión, sintió un nudo formarse en su garganta al pensar en la posibilidad de que Jeongin en verdad lo había olvidado.
— Como sea. — Christopher volvió a hablar dando palmadas suaves en el hombro de HyunJin. — Sé que no me harás caso y te quedarás aquí. — Volvió a girar al lado donde se encontraba la mayoría de personas. — Pero hiciste una mala elección de auto.
— ¿Umh? ¿Por qué? — Se giró al mismo tiempo que el mayor.
— ¿Ves a esa chica? Con la que están hablando. — Hizo una señal con la cabeza haciendo que volvieran a ver a Jeongin y Christian. — Ella es Chaerin. Es novia y representante de Jackson, y él es líder del clan con el que han tenido problemas desde que reinauguraron el Midnight club.
— ¿Por qué? — Le dedicó una mirada confusa apartándola completamente de Jeongin.
— Bueno, el padre de Jackson fue quién lo creó, cuando murió se quedó a cargo su mejor amigo, padre de Christian. A pesar de que mutuamente se apoyan, también han tenido confrontamientos. No hace mucho tuvieron uno de ellos, a diferencia de que fue armado.
— Ajá, ¿y eso qué tiene que ver con mi carro?
— La mayoría de ese clan tienen autos similares a los tuyos, a Jackson le gusta mucho los autos deportivos y por eso se encarga de que su clan sea identificado por ellos. Algo no muy inteligente.
— Entonces...
— Si te le acercas a Jeongin con ese auto, pensará que eres parte de ese club e intentará asesinarte.
— ¡JA! Maldita sea... — Exclamó pasando sus largos dedos por su cabello corto y rubio.
— Estaba escuchando que probablemente hoy tengan un confrontamiento si lo que están negociando sale mal... — Una vez más volvió a girar su cuerpo 360°, sacó una pistola del interior de su saco asegurándose que su cuerpo robusto y la prenda la taparan. — Sabes usarla, ¿no?
          HyunJin miró la arma y en seguida a Christopher, sin decir nada la tomó disimuladamente colocándosela en la espalda, asegurándose de que el saco fuera capaz de esconderla para un acceso fácil y rápido.
— Sí, sé usarla bien.
— Es solo prevención. Algo que te digo es que, si alguien de ese clan se te acerca, no dudes en matarlo.
— ¿Y cómo se supone que lo sepa?
— Es fácil, todos tienen la misma señal. — Dió una palmada suave en la espalda de su menor con una sonrisa en los labios. — Disfruta la noche y no apuestes tu carro. — Dijo dando unos pasos para dejarlo atrás.
— No lo haré, aprendí bien la lección. — Respondió en un tono más alto con una risita entre las palabras.

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⏰ Última actualización: Aug 25 ⏰

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