Resumen:
Una profesora que jamás a tenido una relación y un nuevo estudiante, que podría pasar entre estas almas.
Situada en la hermosa ciudad de Kuoh, vivía una hermosa joven llamada Rossweisse. Trabaja como profesora en la Academia Kuoh, una antigua academia femenina. Últimamente, el director había anunciado que se convertirían de una academia femenina a una academia mixta. Naturalmente, todos dudaban sobre la decisión. La Academia Kuoh es una escuela muy conocida hasta la fecha por sus altas calificaciones y por sus actividades culturales. También era conocido por albergar a las chicas más bellas de Kuoh. Y las chicas hermosas significaban que atraería a muchos pervertidos, que tienen ojos exclusivamente para el cuerpo femenino y sus características que no se permiten ver según los estándares de una chica.
Pero todo eso cambió cuando él llegó. Fue el primer niño en trasladarse de Musutafu a esta escuela. Al principio, las chicas desconfiaban de él porque pensaban que sólo venía a la escuela para echar un vistazo a sus cuerpos. Pero con el tiempo, llegaron a verlo bajo una luz diferente. Era exactamente lo opuesto a un pervertido. Era realmente agradable, dulce, amable y, a veces, también divertido. Trataba a todas las chicas como si fueran sus amigas, lo cual les agradaba. Se hace llamar Izuku Midoriya.
Tenía el pelo verde desordenado, ojos redondos esmeralda, pecas en forma de diamante (que a muchas chicas les parecían lindas) y un físico bastante bueno para su edad.
La presidenta del consejo estudiantil, Sona Sitri, le encargó a Rossweisse que lo ayudara a acostumbrarse a la escuela. Ella estuvo de acuerdo sin dudar. Durante los primeros meses, Rossweisse le enseñó las reglas básicas y todo eso, y luego le hizo un recorrido por toda la escuela. Y como venía de una escuela completamente diferente, tuvo que adaptarse a su nuevo plan de estudios. Al ser maestra certificada, era su deber ayudar a sus alumnos. Y ayudó a la adolescente de pelo verde.
No tuvo problemas a la hora de enseñarle nuevas materias. Sobre todo porque Izuku se mostró muy cooperativo y entusiasmado al respecto. Ella aclaró todo lo que él no comprendería. Y no ha mostrado más que progreso tras progreso. Algo que daba sensación de orgullo a Rossweisse.
Al cabo de cuatro meses, Izuku tenía la confianza suficiente para aprender por su cuenta. Y cuando llegó una prueba, Izuku ocupó el segundo lugar en toda la escuela. Cuando se enteró de eso, quiso exprimirle la vida debido al orgullo que sentía. Quiero decir, ¿qué sentirías cuando tu propio alumno haya superado tus expectativas?
Pero luego se sorprendió aún más cuando Izuku fue a su casa, donde ella le enseñó. Dijo que le gustaba venir aquí y preguntó si podía visitarlo de vez en cuando. ¿Qué crees que dijo Rossweisse?
Ella dijo: "¡SAL DE MI CASA!"
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Estoy bromeando. Sólo estoy bromeando, ¿vale?
Estaba extremadamente feliz con la visita de Izuku. Un nivel de felicidad que no había sentido en su vida. Y a partir de ese día, siempre vería esa linda cara de Izuku cada tres días a la semana. Cuanto más tiempo pasaba con él, más llegaba a saber de él. Y había algunas cosas bastante...interesantes sobre él. Para empezar, era huérfano y trabajaba en un café callejero local para pagar la matrícula escolar. Y segundo, sus padres murieron en algún accidente del que no quería hablar. Ella, obviamente, sentía simpatía por el chico. Cada vez que surgía un tema sobre sus padres, simplemente bajaba la cabeza con tristeza y no decía una palabra. Pero aparte de eso, también había cosas buenas en él. Era un muy buen músico. Se tomó su tiempo libre aprendiendo a hacer música. También era muy buen cocinero, como lo confirmó cuando Rossweisse comió uno de sus platos de ramen.
