¿Por qué tuviste que ser tu...?

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HELLOO.
Antes de que lean este capitulo, cabe aclarar que Dee es un Alfa recesivo y Heavy un Omega dominante... (Si no saben que significa recesivo, busquen en Google jiji).

¡Ahora si, los dejo!

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El rubio tendría que ir a una fiesta en la noche, la habia organizado un compañero de su clase apenas llegando a su casa, Dee estaba bastante indeciso de si ir o no. No le llamaban la atención las fiestas, además de que irían muchos/as Omegas, Lif de ante mano le aviso sobre que eso, pero al rubio no le gustaba tanto la idea, debido a lo que paso cuando era mas pequeño, siempre trataba de alejarse lo más que podia de aquellos, para que no intentarán coquetearle o siquiera propasarse con el. Pero, la pelinegra le prometo que iba a cuidar de él a toda costa, no lo dejaría solo ni por un momento. Entonces, luego de pensar por unos largos minutos de si ir o no, finalmente acepto la invitacion, ahora solo tenía que esperar a que fuera la hora de aquella fiesta...

La fiesta comenzaría a las 12 p.m, por lo tanto tenía que pedir permiso a sus padres, pero, Glam y Victoria no lo dejarían ir, ya que era demaciado tarde la iniciación de la fiesta. Así que, tendría que escaparse si o si, pero primero antes de irse más tarde, tendría que sobornar a Heavy. Ya que el era un soplón y le contaria a sus padres que no estuvo en toda la noche en la casa...

Así que, el rubio camino hacia el cuarto del pelirrojo, tocó la puerta y espero a que Heavy contestara, pero no lo hizo, entonces se adentro a la habitación. Heavy estaba acostado retorciéndose un poco, estaba algo sudoroso, con su respiración un poco acelerada, este miro con una expresión con algo de molestia pero no debido al rubio sino por el dolor que sentia.

—¿Q-Que haces aquiii...? -Dijo pero con un tono bajo-.

Dee se acercó rapidamente a él y cuando estuvo lo suficiente cerca tocó la frente del de ojos verdes, esta algo caliente, suspiró y hablo.

—Llamare a papá, pero primero, tengo algo que pedirte... -Mencionó tranquilamente-.

—¿Que q-quieres justo e-en este momento en que siento que me estoy m-muriendo? -Dijo rondando los ojos y mirándolo con notable irritacion-.

—Dentro de una hora tengo que salir, pero quiero que no le digas nada a papá, y menos a mamá. Te dare 10 dólares si no les mencionas absolutamente nada, ¿aceptas?. -Ofreció el rubio esperando una respuesta del rubio, que no tardo ni diez segundos en ser contestada-.

—S-Si, ngh~... -Dijo junto con un pequeño jadeo-.

—Llamare a papá.

Acto seguido salió de la habitación del pelirrojo y fue rápidamente hacia la plata baja para encontrar a su papá, Dee fue a la oficina de Glam directamente, ya que pasaba la mayor parte del tiempo allí, así que no dudo ni un segundo en dirigirse a aquel lugar. Cuando llegó tocó la puerta y espero a que su papá lo dejara pasar, y así fue, se adentro en esa oficina.

—Papá. -Llamo la atención Dee, ya que Glam estaba muy concentrado escribiendo en algunos papeles-.

—¿Que sucedio ahora?. Sabes que no me gusta que me interrumpan mientras estoy trabajando... -Dijo de una manera cortante, sacándose sus lentes y dejándolos a aún lado, juntando sus manos y entrelazando sus dedos-.

-—Lo sé, lo sé. Heavy, no sé siente bien... Esta sudando demaciado, muy inquieto, estaba un poco jadeante y algo débil apenas pudo hablarme... -Explico el rubio-.

—Oh, dios mio... -Abrió sus ojos agrandandolos, se levantó rápidamente de su silla, busco una que otra cosa de uno de los cajones de sus muebles y salio rápidamente, no, corriendo de su oficina, dejando a Dee con curiosidad, quien se quedó allí parado en medio de aquella habitacion cruzando de brazos y con un dedo encima de sus labios tratando de buscar una respuesta que no llego, entonces dejó de darle vueltas al "curioso" asunto y se dirigió a las escaleras para subir a su habitacion y alistarse...