JJ P.D.V
-¿Señor Edminster? -Éste asintió -Soy la agente Jennifer Jareau y él es el agente David Rossi, somos del FBI, ¿podemos pasar? Es sobre su hija.
Al instante, y sin dudarlo, éste abrió la puerta rápidamente.
-¿Quiénes son? -Preguntó una voz de quien suponía era la madre, a los pocos segundos salió de la cocina.
-Soy la agente Jennifer Jareau y el es el agente David Rossi, somos del FBI, estamos aquí para hacerles unas preguntas sobre su hija -Al terminar la frase, sus rostros se llenaron de confusión.
-¿Por qué? ¿pasó algo? -Preguntó rápidamente -¿Está bien?
-Escuche, ¿que tal si se sientan? -Y señalé el gran sillón que había detrás de ella, los dos atendieron al instante.
-¿Cuándo fue la ultima vez que la vieron? -Preguntó Rossi.
-Hace casi una semana -Dijo el padre.
-¿Su hija mostró algún comportamiento extraño la ultima vez que la vieron? -Preguntó Rossi. Los padres se miraron el uno al otro, negándose con la cabeza.
-No, nada -Respondió el padre, un poco más calmado que la madre.
-¿De qué se trata todo esto? -Preguntó la madre por fin, la desesperación se notaba cada vez más en su voz.
-Escuchen, esta mañana su hija fue secuestrada -Respondió Rossi, y al momento lagrimas comenzaron a caer, como en la mayoría de los casos ocurría. La pena me invadió completamente, como siempre ocurría.
Hotchner P.D.V
-John Colenman, 38 años. Vive en la zona de confort, aproximadamente a tres kilómetros de cada escena. A los 7 años su madre murió a causa de cáncer, su padre se suicidó cuando tenía 14 y terminó al cuidado de su abuela. Todos los sábados los dedica al servicio social -Dijo García a todos en la sala.
-Factor estresante -Dijo Rossi.
-Encaja en el perfil -Dijo Reid.
-¿Algo pasó con él en este último mes? -Preguntó Morgan.
García comenzó a teclear rápidamente dentro de su pequeño portátil.
-Si, su abuela murió hace... -Hizo una pequeña pausa provocando un gran silencio en la sala -Hace dos semanas.
-Eso lo detonó -Dijo JJ a mi izquierda.
-Envíanos su dirección -Dije, y todos se pusieron de pie -Vamos.
Nos pusimos los chalecos de camino a las camionetas. Morgan, Reid y JJ fueron en la primera mientras Rossi y yo en la segunda, para después arrancar a gran velocidad.
_______ P.D.V
Cada vez más y más lágrimas corrían por sus mejillas.
-Escucha, no tienes que hacer esto -Le dije desesperada -Sé que muchas personas te han lastimado y...
-¡Cállate! -Gritó de repente, para después ponerse de pie -¡Tú no sabes nada de mi!
-Lo sé, lo sé, lo siento -Dije, tratando de hacer que se calmara, lo cual fue totalmente inútil.
Comenzó a golpear las paredes con gran fuerza, para después caminar hacia mi y comenzar a golpearme mientras lloraba cada vez más fuerte. Tenía tanto frío que sus golpes, por más fuertes que fueran, a penas y lograba sentirlos, lo único que realmente lograba sentir era la sangre corriendo por cada centímetro de mi cara.
En un repentino movimiento éste dejó caer una navaja mucho más pequeña que la anterior y, aunque no tenía oportunidad de tomarla, una idea vino de repente a mi.
-¿Sabes? yo no te abandonaré -Y al momento éste me miró -Me quedaré aquí, contigo.
-¡Mientes! ¡todos lo hacen! -Y se acercó aún más a mi, metió su mano izquierda al bolsillo y sacó de nuevo su navaja. Mi respiración aumentaba a cada segundo.
Se acercó rápidamente a mis brazos y comenzó a cortar una y otra vez. Tenía que ignorar el dolor y tomar esa oportunidad rápidamente. Doblé mi muñeca lo más que pude y la distracción del hombre hizo que lograra el arrancarle la navaja de las manos, éste me miró con ojos llenos de furia y trató de tomar la navaja de vuelta. Hice lo que pude y logré hacerle un gran corte en la palma de la mano, por lo cual éste retrocedió, soltando un gran quejido. Rápidamente corté la soga que mantenía mi brazo derecho inmóvil y seguido de éste la pierna izquierda.
El hombre, al percatarse de las sogas faltantes en mis extremidades, soltó un gran grito y caminó rápidamente hacia mi. Al acercarse lo suficiente tomó la navaja y, en reacción, logre darle una patada en la pierna, al instante cayó al piso mientras se sostenía la pierna con su mano libre.
De repente la gran puerta de metal se abrió.
-¡FBI! -Gritó una voz desconocida de quien parecía era un chico.
-Ayúdame -Susurré rápidamente.
-Necesito una ambulancia en el sótano sur de la propiedad -Dijo rápidamente por medio de lo que suponía era un micrófono en su muñeca.
Al momento corrió y se hincó frente a mi, para después guardarse el arma a su costado, sin poder ver a aquel hombre en el piso. El hombre, al ver al agente, se enderezó rápidamente con la navaja aún en mano, quise advertirle pero ni una sola palabra logró salir de mi boca, así que decidí robar rápidamente el arma de su costado con mi única mano libre y sin dudar ni un segundo, dispararle a aquel gran monstruo.
El agente simplemente agachó la cabeza y después miró detrás suya para encontrarse con mi secuestrador, y dos balas en su pecho.
Bajé el brazo rendida, para después caer totalmente dormida con un solo pensamiento en mente, al fin esto había terminado.
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Mi Genio Favorito ~Criminal Minds~ (Spencer Reid)
FanfictionY, desde ese día, no volví a ser la misma, ¿cómo podría serlo?