Melodía de Almas Perdidas" es un viaje a través del tiempo y el corazón, donde los secretos se entrelazan y los destinos se cruzan en el oscuro abismo del Hotel Hazbin. 🎶❤️
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•La historia es...
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Había una vez, en los oscuros y retorcidos pasillos del infierno, un demonio singular que se destacaba entre las almas condenadas. Su nombre resonaba en los rincones más sombríos: Alastor, el demonio de la Radio.
Alastor era un ser intrigante, con piel grisácea y ojos rojos como brasas ardientes. Su cabello, corto y rojo, estaba coronado por un monóculo que le confería un aire de elegancia y misterio. Pero no se dejaba engañar por su apariencia. Alastor era un pecador, un alma atormentada que había regresado al infierno después de siete años en busca de un propósito.
Por casualidades del detino llegó al Hazbin Hotel un lugar inusual en el averno. Allí, la princesa del infierno, Charlie Morningstar luchaba por redimir a las almas perdidas y darles una oportunidad de ascender al cielo. Alastor vio en ella una oportunidad, una posibilidad de liberar su propia alma del servicio de un ser desconocido que lo atormentaba.
Pero Alastor no era un simple observador. Se convirtió en alguien confiable para la princesa, un líder carismático y astuto. Aunque su sonrisa era constante, ocultaba secretos profundos. ¿Qué le importaba a Alastor? ¿Qué motivaba sus acciones?
Para él, el infierno era un juego, una partida de ajedrez cósmica. Le interesaba la estrategia, la manipulación y la búsqueda de poder. Pero también encontraba placer en la música, en las ondas invisibles que transmitían sus pensamientos a través de la radio. La música era su compañera, su confidente en las noches solitarias.
Alastor tejía su propio destino en el infierno. ¿Qué le importaba realmente? Solo él lo sabía. Pero una cosa era segura: su presencia era imposible de ignorar, y su historia estaba lejos de llegar a su fin.
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El aire en el lugar estaba cargado de tensión. Los ojos de Alastor se deslizaron por la habitacion que ocupaba el monarca.La luz tenue de la habitación contrastaba con la presencia de ambos.
El rey estaba sentado en uno de los sillones con sus lentes,antes de que Alastor le interrumpirse con sus "ideas fantasticas", él estaba sumergido en una lectura.
Alastor, se encontraba en una encrucijada. Había decidido que Lucifer, el rey del abismo, sería su aliado. Pero Lucifer no compartía su entusiasmo.
—¿Qué deseas, Alastor?—su voz resonando en las paredes de la habitacion—No tengo tiempo para tus juegos—
Alastor sonrió, sus labios curvándose en una mueca siniestra—No son juegos, mi querido Lucifer. Son oportunidades. Imagina lo que podríamos lograr juntos—
Lucifer se inclinó hacia adelante, sus ojos carmesí estaban clavados en Alastor—¿Por qué debería confiar en ti? Sabes,no e visto tu expediente y no se como llegates hasta quí,pero se nota que eres astuto e impredecible.—hizo una pausa—¿Ya dije que eres un demonio?—
A pesar de las dudas de Lucifer,Alastor siguió persistiendo —Porque soy un maestro de las sombras. Puedo influir en las almas, sembrar discordia, y todo sin que nadie sospeche. Además, encuentro tu desdén hacia mí fascinante—
Lucifer se cruzó de brazos—Supongamos que quiero hacer un trato contigo,supongamos.—aclaró antes de seguir—¿Qué ganarias tú con eso?—
Alastor se inclinó aún más cerca—Poder, influencia, entretenimiento.Ademas,podemos congeniar muy bien—
Lucifer bufó ante la idea—No te confundas, Alastor.Tu y yo no somos amigos.Y no necesito tu ayuda,para cambiar algo,puedo hacerlo yo solo.—
Un breve silencio se apodero de la habitación,pero Alastor añadió unas palabras—Entonces, hagamos un pacto. Yo seré tu consejero, tu sombra. Te ayudaré a mantener el orden en el infierno. A cambio, tendre tu confianza.Y,si yo llego a romper el trato...—Hizo una pausa—Bueno ya sabes lo que les pasa a los demonios que rompen sus promesas—
Lucifer se levantó del sillon—Un pacto, ¿dices? Muy bien, Alastor. Haremos el trato. Pero escucha bien, no toleraré traiciones. —
Alastor se inclinó en señal de respeto—Por supuesto, majestad—Su sonrisa se hizo mas amplia,Lucifer lo notó,pero lo dejo estar.
Los dos demonios estrecharon sus manos. El pacto estaba sellado. Alastor sabía que Lucifer no saldría perjudicado; después de todo, el rey del abismo siempre tenía un as bajo la manga.
Al separarse del apreton de manos Lucifer habló—No intentes subestimar mi astucia—
Alastor asintió—Nunca lo haría.Pero recuerda esto, rey del abismo,las sombras pueden ser más poderosas que la oscuridad.—Y con esas palabras, Alastor se desvaneció en la oscuridad.
"Tonterías,las sombras son parte de la oscuridad"
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