II

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Su segundo problema era la forma en que coqueteaba, no quería verse demasiado obvia y tampoco demasiado novata, no quería que el mayor supiera que era una principiante en todo el tema de las citas y el amor en general.

Y la primera y única persona a la que su cabeza le pudo decir que recurriera, fue Yooyeon, de nuevo.

—Sabes, esperaba que este martes fuera como los otros martes en mi vida—Yooyeon habla mientras pone los platos sobre la mesa.—Tranquilos y silenciosos.

—¿Estoy perturbando tu paz mental?—Seoyeon pregunta desde su lugar en la mesa cruzándose de brazos aparentando estar ofendida.

—De hecho, perturbas mi tiempo para jugar Zelda, pero como no quiero que tu cita termine contigo llorando entre mis brazos...—Yooyeon termina de acomodar todo.—haré caso a tus peticiones.

Seoyeon le sonríe y asiente contenta.—Unnie, prometo recompensarte después.

Yooyeon toma su silla y se sienta justo frente a Seoyeon.—¿Segura que te invitará a cenar?

—Si, me envió algunas opciones de restaurantes y preguntó cuál me gustaba más, entonces elegí uno de comida italiana.—Seoyeon mira sus manos nerviosa.—Aunque no quiero comer mucho porque pensará que soy una glotona...

—Ey—Yooyeon la detiene.—Si va a ser tu novio no tienes porque pensar en si comer o no frente a él.—Dice seria, molesta por lo dicho por la menor.

—Lo siento, unnie—Seoyeon le sonríe.—Es solo que Heeseung me ha gustado desde hace años y todo esto parece surreal, es tan.. perfecto.

Yooyeon rueda los ojos.—No lo idealices tanto. Como sea, imaginemos esto.

Seoyeon pone atención.—Soy toda oídos.

—No quiero asumir estereotipos pero si yo fuera el, al llegar a la mesa te ayudaría con la silla al momento en que te sientes, etc. Eso que hacen algunas personas para sus parejas.

—¿No es eso cuando ya son novios?

—No lo sé, yo hacía eso en las primeras citas con mis ex novias.—Yooyeon sonríe, Seoyeon solo permanece callada en su lugar.—Seguro platicarán de algo del día, eso ya es tema de ustedes, pero si quieres verte coqueta, podrías hacer esto.—Yooyeon acerca su mano lentamente a la de Seoyeon que reposaba sobre la mesa, recarga su barbilla en su mano libre y le observa.—Y le pones atención a cualquier tontería que esté diciendo.

Seoyeon está segura que podría perderse en la mirada de Yooyeon si seguía haciendo contacto visual con ella.

—Seoyeon ¿Estás escuchándome?—Yooyeon suelta su mano y regresa a su lugar.—Si me estás ignorando me voy a enojar.

—No, no, estoy bien, sigue.—Seoyeon le sonríe.

—No dures mucho haciendo eso, sería raro. Podrías mantener contacto visual con él toda la cena, no lo vuelvas raro tampoco, solo mientras sea necesario verlo a la cara, obvio no estarás masticando y viéndolo a los ojos.—Ambas ríen—Los hombres son fáciles, créeme que con solo hacer eso va a caer, sino es que ya está enamorado de ti.

Seoyeon asiente.—¿Y qué hago cuando terminemos de cenar?

—Bueno, si quieres tomar un poco más la iniciativa, podrías cambiar de lugar y ponerte a su lado.—Yooyeon se levanta y se cambia de asiento para quedar junto a la menor.—Podrías comenzar a jugar con sus dedos—Comienza a hacer cada cosa que dice, provocando un hormigueo en el cuerpo ajeno. Su tono de voz se suaviza y baja de volumen.—Si lleva anillos, podrías jugar con ellos mientras aún los lleva puestos y por último tomar su mano con seguridad. Haces todo mientras tu mirada va de sus ojos a sus manos.

Seoyeon siente el hormigueo en sus manos, esa sensación de satisfacción recorriendo desde la punta de sus dedos hasta sus pies, un sonrojo apareciendo en su rostro y su mirada perdida, de nuevo, en la mirada ajena.

—¿Sería ese un buen momento para besarlo?—Pregunta casi en un susurro.

—¿Quieres ser tú quien lo bese?

"Quiero besarte a ti" piensa la menor.

—Tal vez.

—Eso sería muy arriesgado de tu parte.—Yooyeon baja la mirada a los labios de Seoyeon que tan solo apenas un día antes había probado.—Pero yo te diría que si.—Reafirma su agarre en las manos ajenas dando su aprobación.

Seoyeon es la primera en acercarse, inclinando su cuerpo un poco, Yooyeon se acerca y ambas cierran los ojos cuando sus rostros están a centímetros, pero Seoyeon es demasiado tímida para cerrar el beso, por eso es Yooyeon quien une sus labios en un beso suave, un movimiento fino dándole la confianza a Seoyeon de seguirla, sus labios se mueven a la par encajando perfectamente.

Seoyeon aleja su mano de la palma de Yooyeon y la lleva al rostro ajeno, acariciando suavemente la mejilla de la mayor con su pulgar.

Yooyeon se aleja y le sonríe nerviosa, aunque Seoyeon no lo podía notar por estar sumergida en lo que ella estaba sintiendo en ese momento.

—Bueno, es así como creo que podrías ser coqueta en tu cita.—Yooyeon se pone de pie y toma los platos vacíos.—Guardaré estos platos.

Bueno, Seoyeon estaba convencida que ahora sabía que hacer en su cita con el chico, un problema menos en su cabeza. Un problema más resuelto por Yooyeon.

Dating Problems || yooseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora