Capítulo 23 Marlene

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¡Uff! Lindsay se había enfadado. Y Laura estaba estresada. Y Cam era creído sólo porque tenía como tres mansiones en el mundo. Seguí a Lindsay al cuarto y me cambié. Al salir, Cam había pedido pizzas para comer. Comimos fuera, alrededor de una mesa bajo una sombrilla. Hacía una calor impresionante comparado con Nueva York, que ya hacía bastante frío. Empezamos a comer y noté que sólo éramos seis.

- Sé que Laura está estresada, pero, ¿y Dennis?- pregunté.

- Thomas lo sabrá, es su compañero.- dijo Cam.

- ¿Edison?- le pregunté a Thomas.

- Dice que no quiere bajar.- respondió Thomas.

Comimos en silencio y cuando acabé, cogí un trozo de pizza y me levanté.

- Voy a hablar con Dennis.- dije.

- ¡Comida en la casa no!- dijo Cam.

- Pues ahora sí.- dije.

Subí arriba y me encontré a Dennis en su cama, mirando el techo.

- Te traigo pizza.- dije.

- Gracias, me estoy muriendo de hambre.

- ¿Cuándo no?

Dennis se sentó bien y le di el plato con la pizza.

- Dennis, Laura no está abajo. Tampoco sale de su cuarto.- le dije.

- No la culpo, ¡nadie nos dijo que íbamos a venir juntos!

- Sí, ese pequeño detalle se me escapó.

- Aquí no hago nada, voy a irme y así Laura podrá salir de su cuarto.

- ¡Dennis! ¡Has conducido alrededor de 24 horas para llegar aquí! No voy a permitir que te vayas.

- Lo he de hacer, además, tengo una prima en Carolina del Norte, puedo pasar el finde con ella, hace mucho que no la veo.

Suspiré, Dennis era mi mejor amigo, parecía estúpido que se tuviese que ir. Dennis me tocó el hombro.

- Lo he de hacer por Laura, para ti y para todos. Me marcho en seguida.

- Si es lo que tú quieres...

Marché del cuarto y bajé abajo. Cam y Jason jugaban a ping pong. Lind estaba mirándose en ek espejo y Thomas y Kate hablaban sentados en el sofá. Era un ambiente bastante tranquilo. No sabía donde estar así que salí a respirar un poco de aire fresco. Encima mío estaba la habitación de Laura. Miraba por la ventana. Por un lado estaba enfadada con ella porque exageraba mucho, entendí que no le fue bien el año pasado, pero los mejores amigos nunca se dejaban atrás. Por otro lado me paba pena, pero más el primero. Dennis se marchó quince minutos más tarde. Después de eso Laura bajó de su cuarto.

- Hay una playa cerca, vamos a surfear.- propuso Cam.

- ¿Tú? ¿Sabes surfear?- pregunté burlonamente.

- Sí, y seguro que mucho mejor que tú.- dijo Cam.

- No empecéis otra vez.- intervino Thomas.

- Yo también aprendí de pequeño, creo que me acuerdo de algo.- dijo Jason.

- Cam me enseñará a mí.- dijo Lindsay.

- ¡Yo también quiero!- protestó Kate.

- ¡A la playa!- dijo Laura.

Llegamos todos a la playa, no había mucha gente. Cogí una tabla de surf y me dirigí al agua. Estaba temperada. Cam se quedó a enseñar a Lindsay lo que necesitaba saber y yo y Jason íbamos nadando en la tabla. Cuando estábamos suficientemente lejos para poder coger una ola nos paramos y nos quedamos sentados en las tablas.

- ¿Te acuerdas de surfear?- le pregunté a Jason.

- No, casi nada así que si me caigo sería completamente normal.- respondió.- Pero la vida sería aburrida sin riesgos.

Eso me hizo reír.

- ¿De qué te ríes?- me preguntó.

- Nada nada, es que yo siempre digo eso.- dije.

Jason me salpicó y yo lo empujé y se cayó de la tabla. Me reí pero vi una ola.

- ¡Qué viene una!- dije.

Jason se volvió a subir a su tabla y nadamos hasta la ola. Fue bastante fácil. Giré la tabla y cuando la ola llegó me puse de pie y empecé a surfear. Al llegar a la arena salpiqué sin querer a Lindsay, que salió corriendo del agua.

- ¡Marlene Leone!- se quejó.- Este es mi biquini nuevo, ¡no me lo salpiques!

- Lind, los trajes de baño son para mojarse.- dije.

- Pues este no, era caro.- dijo Lindsay.

No hacía nada de sentido esta conversación. Cam salió para ver a Lindsay y entonces llegó Jason.

- ¡Eso ha sido una de las mejores cosas que he hecho en años!- dijo Jason.

- Y mira, no te has caído, un milagro del surf.- dije bromeando.

Entonces me giré hacia Cam.

- Si tú dices que lo puedes hacer mejor que yo, ¡te reto!- dije.

- Será competir contra un bebé.- dijo Cam.

Competimos y empatamos, ¿por qué siempre empatábamos?

- Próxima parada, ¡el cine!- anunció Cam.


PERDIDOS EN LA UNIVERSIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora