Incluso cuando pensó que ignoraría al pelirrojo todo el día no pudo completar eso, se sentía tan inútil, tan observado, y vaya, él lo sabía, sabía que Monty no tuvo una mala intención, y no merecía esto.
—¡Freddy!, oh vamos por favor, lo siento —agarró el brazo del castaño, con suma delicadeza, intentando llamar su atención.
—Dijiste muy claro: "no me gusta llamar la atención", ¿qué demonios fue eso, Monty?
—¿Eso?
El menor retiró su brazo frunciendo el ceño.
—Freddy por favor —dijo para agarrar el brazo del menor una segunda vez.
—Monty, ya para con esto, por hoy ya hiciste mucho, no quiero que la gente se haga ideas en su cabeza —retiró su brazo ablandando su semblante.
Montgomery cayó derrotado, Freddy paró de caminar, miró al contrario, mirada gacha, pensativo, desesperado...
Estaba prácticamente en otro mundo, todo a su alrededor se ralentizó, la fase pasada en esos instantes hizo que las palabras recobraran conciencia. Freddy vio como el contrario abría la boca, quería decir algo, pero así como la abrió, terminó cerrándola al instante.
—Nos vemos... —suspiró para seguir con su camino.
El mayor se quedó estático, escuchaba como las pisadas se alejaban, su cuerpo se contraía, quería saber...
"¿Qué hice mal?, acaso"...
—¡¿Acaso no hay nada entre nosotros?!
Freddy volteó con una mirada de temor.
Montgomery lo vio, pensaba que haría algo... Pensaba que le iba a responder con algo sutil.
Sin embargo eso solo era un sueño que nunca se haría realidad.
—Cállate.
Fue casi inaudible. Después de decir eso el castaño salió despavorido.
"Espero nadie nos haya visto".
Pensaba el castaño mientras caminaba hacia la estación de tren.
...
—Hola Monty, ¿cómo estuvo tu segundo día de escuela?
Montgomery pasó de largo dirigiéndose a su habitación.
—¿Tan mal?
Se cuestionó el menor.
Monty
¿Acaso hice algo mal, Freddy?
Nunca estuve más seguro de una decisión que ahora.
Afrontar esto es terrible... ¿Soy gay?
Reí, es tonto decirlo así... ¿Lo soy?
Eso significa que... Claro, me gusta Freddy, tonto.
Lo arruinaste todo, el mundo no está preparado para gente como nosotros, no mantuve un perfil bajo, no me oculté... No me oculté......
Freddy
No se ocultó...
—¡Osito!, llegué.
—¡Freddy! —dijo entrando a mi habitación, saltando en mi cama dándome un fuerte abrazo.
Me refuté a hablar.
—¿Quieres jugar a algo?
—A-A, primero a hacer los deberes —dijo la autoridad.
ESTÁS LEYENDO
No lo entenderían "Monteddy"
RomanceEres alguien muy energético, deportivo, irresistible. Todas quisieran estar contigo pero nunca haz correspondido a nadie, no sabes el porqué, pero sabes muy bien que no sientes atracción por mujeres, sin embargo nada "raro" te pasaba por la mente, n...