Este libro es dedicado a todas aquellas personas especiales del mundo...
Que encuentran alegría bailando solas canciones de la radio, o que lloran viendo cualquier película, desde Titanic hasta E.T (como yo), Personas a las que algunos llaman "cursis ", pero que somos los únicos que aun sabemos apreciar la ternura de la vida...
Espero que al leer estas páginas puedan reírse y emocionarse tanto como yo al escribirlas...
Y que por favor me corrijas si tengo errores, comentes y votes si te gusta!!!
Sol T
Prologo.
Niall Horan tomo el metro como todos los días a las 7:30 de la mañana. Subió, pago su boleto y se sentó en el primer asiento del lado de la ventanilla. Le gustaba observar a las personas apuradas, que caminaban alrededor del metro, antes de que este se pusiera en marcha.
A las 7:45 cuando el metro comenzaba aponerse en marcha subía ella...
Era de estatura media, con un largo cabello rubio rizado y ojos azul muy intenso.
Siempre llegaba tarde con una gran bolsa de caramelos de frutilla, que, según lo que Niall sospechaba eran el motivo de su retraso, ya que ella se detenía cada mañana a comprarlos en la terminal. Luego de pagar su boleto ella se sentaba a su lado, le sonreía y extendía la bolsa.
-¿Quieres unos?-preguntaba con amabilidad, su mirada dulce la hacía imposible a cualquiera decir que no.
-Claro-respondía por cortesía mientras tomaba algunos. Luego ella guardaba la bolsa y se distraía charlando con el chófer o leyendo.
Fuera de eso jamás hablaban entre sí, el viaje era silencioso, a veces se oía el ruido de envoltorios de caramelos o tal vez alguna tos, hasta que el metro se detenía en la estación, ambos bajaban y recorrían por separado las calles quedaban hasta el instituto St Vincent, al que ambos asistían.
Para Niall esto era monótono y aburrido, pero, al menos no debía sentarse junto a la robusta señora de vestido floreado, que ocupaba casi dos asientos ella sola y hacia sofocante el viaje a su lado, ya que expedía un horrible olor a colonia de limón barata mezclada con sudor.
¡Era asqueroso!
Volviendo al chica, ella parecía agradable, no era de la clase de persona con la que a él le gustaba relacionarse, pero le animaba la mañana con sus caramelos de frutillas y sus contagiosas sonrisas.
Además, el se alegraba de verla aparecer cada mañana, porque si ella no llegaba, Niall debía sufrir la tortura de vestido floreado...
Capitulo 1.
Elisabeth caminaba de un lado a otro de la estación, esperando el metro. Normalmente era una persona dulce y pacífica, pero estaba tan enojada, Que golpearía a alguien!
El era un completo idiota, engreído bastardo, que la había utilizado y humillado más de lo que ella se merecía! Había sido cruel y egoísta, y lo peor de todo era que ella lo adoraba...
Cuando el metro llego, tuvo ganas de arrojarse en las vías, -¡pero no!-pensó para si misma, ¡lo arrojaría a él!!!
Estaba muy enfadada y avergonzada pero no lo haría, no derramaría ni una lagrima por su culpa, si a él no le importaba que fueran novios desde hacía cuatro años, ¿por qué a ella debía importarle?
Subió al metro y se desplomo en el primer asiento, se sentía como un trapo viejo usado y desechado. Sus pensamientos no la ayudaban a mantenerse tranquila, hasta que ya no pudo contenerse más y se echo a llorar. No eran lagrimas de tristeza, sino de vergüenza, ¡estaba llorando en el metro, frente a un montón de personas que no conocía!
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Caramelos de frutilla :)
Teen FictionNiall Horan es el típico "chico lindo", despreocupado y popular, pésimo en matemáticas y el mayor libertino del instituto St Vicent, se rumorea que más de una chica se ha desmayado ante una de sus sonrisas. Lissie Hanson es una joven de 16 años, dul...