What we are. | Matías Recalt.(y el cast?)

010 · Una Distracción

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Después de esperar, encontré mi tan ansiado empleo (ya que yo quería ser actriz de pequeña, fui a teatro y realicé varias obras de diferentes géneros, por eso tenía tanta ansía para empezar) e inmediatamente leí el papel sobre el personaje del que iba a actuar y me preparé para enviar un video leyendo una de las partes del guión de la película e improvisando una escena del personaje que me asignaron.

Con muchos nervios y mientras mi hermano me motivaba y apoyaba diciéndome que todo iba a salir bien y que seguro me escogerían, mandé mi video. Esperaba con toda mi alma que me escogieran, estaba muy impaciente, pero ahora tenía que esperar un mes o así hasta que me confirmaran de que estaba dentro. Así que sin más remedio esperé.

. . .

Matías no me escribe desde la última vez que nos vimos, y eso fue hace una semana. Estoy muy preocupada tanto por él como por su relación con aquella chica pelinegra, que por cierto también era hermosa.

Quizás Matías decidió no escribirme y ya está o capaz que su celular se rompió o yo que se... Nunca estuve tan desesperada por esperar una respuesta de aquel chico con quien compartí infinidad de cosas.

Hasta que alguien nuevo apareció en mi camino, alguien que no había visto antes. Creo que se llama Fernando, pero no sé su apellido. Sé que interpretó a Arturo Nogueira en la película "La Sociedad De La Nieve" y también actuó en la famosa serie "Apache: La Vida de Carlos Tévez". Y ahí era conocido como "Jorge".

Ni me importa, esta re lindo el pibe igual.

— Holaa, que tal estaan. — Dije, intentando hacer entender que ya estaba acá, quería hacer que Fernando me mirara, no sé, solo quería que nuestras miradas conectaran. Quería verle más cerca y mejor.

— Hola. — Sonríe.— Pará, no sabía que tenías una hermana, Juani. — Dijo sonriendo, mirándome y después a Juani.

— Y bueno, no voy contándole mi vida a todos. — Ríe mientras lee los comentarios del directo.

Fernando se me quedó mirando de arriba a abajo, encontrándose con mis ojos cuando llegaba a la altura de mi cara.

— Bueno. ¿Cómo te llamas, linda? — Mi hermano levanta una ceja y le da un ligero golpe con el codo.

— Marta, un placer. — Rio y le tomo la mano, la sonrisa me sale sola y no puedo evitarlo.

Iba a irme a mi habitación, pero quería hacerlo notable. Se me hacía muy borde decir adiós y ya, así que antes de marchar, le guiñé el ojo al pelinegro que se encontraba sentado en la cama junto a mi hermano, quien me sonrió de vuelta, pero esta vez, una sonrisa más confiada.

Me puse como un tomate y me fui a mi pieza/habitación lo más rápido que pude pero sin correr. Que vergüenza, esos segundos parecían una eternidad.

DIOS, es decir, es más lindo de lo que yo pensaba sin duda, hacía mucho que no lo veía igual. Y tan solo pensar que estaría haciendo una película con él me ponía los pelos de punta. No sé ni como se llamaría la película, solo esperaba que me escogieran a mi y a Fernando también, así que cruzaba los dedos.