Capitulo 4; Simpatia

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-¿Y a donde se supone que vamos? –Selena entro al salón arreglada, Maria, la empleada le había avisado que hoy saldría a comer fuera con su abuelo  Rebusco entre su ropa algo mas desapercibido, aunque no dejaba de ser de su estilo  Un vestido corto sin tirantes, que se ajustaba a su cuerpo perfectamente y un gorro a juego  Se rizo el pelo

-No lo se –Katia se encogió de hombros mientras analizaba a su hermana, definitivamente no era la misma  Ella llevaba un vestido azul oscuro de tirantes y un cinturón negro, los tacones a juego y su bolso  Nadie diría que eran familia –El abuelo debe estar a punto de bajar

-Hola niñas –Roberto se apareció vestido con su traje chaqueta negro y camisa blanca, sonrió –Ya podemos irnos

-¿A dónde? –Selena camino tras el hacia la puerta -¿Si se puede saber?

-Claro, los padres de un amigo vuestro nos invitaron a almorzar –Roberto paso por delante del auto y siguió caminando hacia la puerta del jardín –Vuestro vecino, ¿Cómo se llamaba? Jack

-¿Jack? –Katia frunció el ceño, desde cuando Jack era tan amable con su abuelo y con su hermana  Aquí había algo raro

-Parece que el día promete –Selena sonrió a su hermana, ¿Así que Jack quería hacerse el simpático? De acuerdo, ella tambien podía ser miss simpatía

Apenas unas casas tras la suya se encontraba la vivienda de la familia Gogh

Sofía, Tomas y sus hijos, Jack y Meredid

Se pararon frente al gran portón de madera y llamaron al timbre, enseguida una empleada con su uniforme les recibió con una sonrisa

-Buenos días señores –La mujer se ofreció a tomar los bolsos de ella y la chaqueta de Roberto –Les están esperando, por aquí por favor –Les indico el camino, ambas hermanas caminaban en silencio tras su abuelo

-Buenos días –Roberto saludo al entrar al salón, Tomas Gogh, estaba sentado en el sillón principal, a su derecha su hija de unos diez años Meredid y en el sofá de terciopelo blanco  su esposa, Sofía, junto a  Jack –Les agradecemos la invitación

-Es todo un placer recibirles en nuestra casa –Tomas se levanto de su lugar y estrecho la mano de Roberto, después miro a las chicas con una sonrisa –están preciosas señoritas

-Bienvenidos a nuestra casa –Sofía les sonrió de forma calida, parecía una mujer simpática  Selena no pudo evitar preguntarse si Jack era adoptado

-Hola señora Gogh –Katia le sonrió, la conocía de varias fiestas en las que habian coincidido

-Hola Katia –La mujer sonrió, después miro a Selena –Vaya estas muy cambiada, me alegra verte

-Gracias señora –Ella le devolvió la sonrisa –Tienen una casa preciosa

-¿Bueno que le parece si vamos a tomar algo mientras los chicos se ponen al día Roberto? –Tomas le indico la puerta del salón y junto a su esposa y el abuelo de las chicas salieron

CHICA MALADonde viven las historias. Descúbrelo ahora