Recuperando La Confianza - Una Historia de Paw Patrol

Capitulo Catorce

Han pasado dos días desde que Chase llegó a un acuerdo con Marshall. Durante los últimos dos días, no hubo misiones para ellos. Chase y Marshall pasaron todo el día juntos. Fueron al parque y pasaron el tiempo como antes hace cinco años. Jugaron a la traes, al frisbee, el juego de la cuerda y a otros juegos. Disfrutaron del tiempo que pasaron juntos.

"Yo gano", dijo Chase. Soltó la cuerda y se acercó a Marshall. Marshall estaba en el suelo, así que Chase lo ayudó a levantarse.

"Vamos", dijo Marshall. "Vamos una ronda más". Se cogió la cuerda en la boca.

Chase se rió. "Dale pues", respondió. Chase recogió el otro extremo de la cuerda.

"¡Una, dos, tres!" Ambos dijeron al unísono. Tiraron de la cuerda con toda la fuerza que pudieron. Chase y Marshall eran tan fuertes como el otro, por lo que la línea se movió lentamente. Pero Chase cometió el error de mover el pie, y Marshall tiró de la cuerda, dejando caer a Chase al suelo.

"Gane", dijo Marshall.

Chase se levantó. "Ahora está empatado", dijo. "Es de diecisiete a diecisiete. ¿Quieres romperlo?"

"Claro", dijo Marshall. Recogieron la cuerda y contaron. Tiraron de la cuerda durante un minuto antes de que empezara a moverse. Se movió a un lado, pero siempre volvió a su lugar original. Finalmente, Chase se inclinó hacia atrás y giró la cabeza, desequilibrando a Marshall. Marshall soltó la cuerda antes de caer al suelo.

"Supongo que gano", dijo Chase. "Vamos. Tenemos que ponernos en marcha".

"Honestamente, no", dijo Marshall mientras se levantaba. "Ash está con su mama. Todavía tenemos tiempo para pasar el rato. Tenemos que compensar todo el tiempo que te perdiste".

En ese momento, sus etiquetas de cachorro se iluminaron. "Paw Patrol, al Lookout", dijo Ryder a través de la etiqueta del cachorro.

Chase levantó una ceja en Marshall. Marshall se rasco el cuello. "O tal vez en otro momento".

Chase sacudio su cabeza y se rió. "Vamos, Ryder nos necesita". Chase y Marshall corrieron hacia el mirador. Fueron los primeros en llegar allí. Skye, Rubble, Zuma y Rocky los siguieron. Al darse cuenta de que Marshall no se estrelló con nadie, Chase lo empujó. "Oh, no", dijo Chase. "Marshall, tienes que tener más cuidado".

"Oh, lo siento", dijo Marshall sarcásticamente mientras se levantaba. "¿Quieres decir así?" Empujó a Chase hacia atrás, lo que lo hizo chocar con Skye. Chase se reía demasiado como para darse cuenta que Skye se sonrojo.

"Sí", dijo Chase. "Así mismo". Todos se rieron mientras se cerraban las puertas. El ascensor subió, se detuvo en el segundo piso para cambiarse, y continuó hasta el piso superior. Todos saltaron y se metieron en sus posiciones. "Paw Patrol, listo para la acción, jefe, Ryder".

"Gracias por venir tan rápido", dijo Ryder. Encendió la pantalla. "Tenemos una emergencia. El granjero Al dejó su tractor en punto neutral , y se estrelló con los corrales de ovejas y cerdos. Algunos de los cerdos y ovejas huyeron. Para esta misión, necesito a Rocky. Arreglarás los cercos y moverás el tractor de vuelta al granero".

"Verde significa ir", exclamó.

"Y Chase, localizarás a los animales desaparecidos y los pastorearás hacia nosotros. Todavía no tengo tu traje de espía hecho, así que tendrás que encontrarlo con tus sentidos".

"Chase está en el caso", dijo Chase.

"Muy bien, Paw Patrol está en marcha", dijo Ryder. Corrió hacia el poste del bombero y se deslizó hacia el garaje.

Chase miró a su lado y notó que Rocky se movía de un pie a otro. "¿Qué pasa, Rocky?"

"Todavía no confío en ti", dijo Rocky.

"Puedes confiar en él", dijo Marshall. "Deberías darle otra oportunidad".

"Le daré una segunda oportunidad cuando demuestre que se lo merece. No creo que sea justo que haya vuelto de la nada, y automáticamente tenemos que tomarlo como si nada".

"Entiendo lo que estás diciendo", dijo Chase. "Pero puedo prometerte que demostraré que merezco una segunda oportunidad".

"Espero que sí", dijo Rocky. "Porque si no lo haces, solo demostrarás que volviste pa' nada". Se acercó al tobogán y se deslizó hasta su vehículo.

Los otros cachorros ahora estaban mirando a Chase. Chase suspiró y miró a los demás. "Ay nos vemos", dijo. Chase se deslizó por la rampa y se metió en su vehículo.

Chase, Rocky y Ryder condujeron hasta la granja sin decirse una palabra. Cuando llegaron allí, el granjero Al corrió hacia ellos. "Gracias por venir", dijo el granjero.

"No hay problema", dijo Ryder. "Rocky, asegura las vallas. Chase, encuentra a los animales desaparecidos y tráelos de vuelta".

"Hecho", dijo Rocky.

"Sí, señor", dijo Chase. Corrió hacia la valla y miró al suelo. Incluso sin su equipo, podía ver algunas huellas en la tierra suave. "Encontré algunas huellas". Él olfateó las huellas de los penos. Tiene el olor de las ovejas. "Tengo el olor a oveja". Empezó a seguir el olor. Subió la colina, cruzó el granero, a través de las plantas de tomate y terminó en el laberinto de maíz. "Encontré a dónde fueron las ovejas", dijo a través de la etiqueta del cachorro.

"Genial", comentó Ryder. "¿Dónde están?"

"En el laberinto del maíz", respondió Chase.

Hubo una larga pausa. "Está bien", dijo Ryder finalmente. "Cuidado".

"No te preocupes, Ryder", dijo Chase. "Puedes contar conmigo". Siguió el aroma a través del laberinto. Terminó en un callejón sin salida un par de veces. Terminó de nuevo al principio una vez. Cuando estaba a punto de darse por vencido, escuchó a las ovejas. Dio la vuelta a tres esquinas y encontró a las ovejas acurrucadas. Ladró por su micrófono y los sacó del laberinto. Una vez que los sacó, los llevó de vuelta a su recinto. Una vez que Chase los llevó, salió y cerró la puerta detrás de él. "Las ovejas han regresado a su recinto", dijo.

"¿Y los cerdos?" Ryder dijo.

Antes de que Chase pudiera decir nada, Rocky interrumpió. "Sé dónde están", dijo.

"¿Dónde?" Preguntó el granjero Al.

"Sí", respondió Rocky. "Ese es el problema".