Capitulo 11

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Acompañada por Jaime entro en el bar donde Alicia y Alex nos esperan. Al vernos salen con sus maletas y unas grandes sonrisas, que muestran la felicidad de reunirnos estos dias. Jaime ayuda a Alex con el equipaje y Alicia y yo comentamos el panorama.

-Muy majo tu amigo. Ya veras cuando lo vean todas estas... Vas a ser el tema del dia- Dice entre risas.

-No seas tonta- Digo zanjando sus carcajadas- Es solo un amigo.

-Claro, igual que el amigo de Carmen, con el que lleva dos años casada.

-Lo de Carmen y Oliver es distinto, se veia venir que acabarian juntos.

-Pues a vosotros se os ve igual.

-Alicia, para ya- digo evitando reirme escandalosamente.

Jaime se acerca a nosotras y se presenta educadamente, ya qu es la primera ve que ve a Alicia. Mientras Alex nos mete prisa con movimientos extravagantes.

-Ya vamos, pesado.-Le contesta.

-Eva estara alli lleguemos pronto o tarde.- Digo con cierto tono de recochineo.

-Me voy a declarar, es normal que este nervioso ¿No?- Manifiesta Alex

Jaime toma mi mano, se acerca a mi oido y comienza a susurrar.

-Creo que me tienes que poner un poco al dia de todo lo que pasa entre tus amigos- Dice mientras pone cara de estar perdido.

-Ya tendremos tiempo- Contesto riendo- El dia es muy largo.

Alicia y yo nos sentamos en los asientos traseros. Dejamos a los hombres delante para poder hablar tranquilamete. Durante el viaje la cuento todo lo sucedido con Pedro. Y ella a mi el plan perfecto de su hermano para conseguir salir con Eva. Juintas sacamos punta a todos los temas de actualidad en el grupo. A medio camino cambiamos las tornas. Alex y Jaime pasan a ocupar nuestros asientos. En el resto del trayecto la conversacion pasa a ser sola y exclusivamente de futbol. El hecho de pertenecer a diferentes equipos consigue qu mi cabeza diga ¡basta!. Mientras mis acompañantes continuan con el debate me centro en la carretera. Cientos de kilometros. Miles de neumaticos rodando sobre ellos. Miles de vidas e historias. No me soporto cuando me pongo filosofica...

Un cartel llama mi atencion. Ya hemos llegado, solo queda encontrar la playa donde pasaremos estos dias. Alicia toca mi brazo y con la cabeza me indica que dirija la mirada hacia atras. Lo hago y descubro que Alex esta hechando una cabezada. Reconduzco mi vista hacia delante, asi consigo ver que el mar esta justo delante. Desviando la mirada hacia un lado, una casa solitaria anclada por fuertes troncos a la arena hace que Alicia grite.

-¡Esa es! Hemos llegado, por fin...

-¡¿Que pasa?!- Exclama asustado Alex, que parerce haberse despertado.

-Tranquilo, solo hemos llegado- digo tranquilizandole.

Entre risas por le despertar de Alex llegamos a la casa. Varios coches estacionados me resultan familiares. Uno a uno bajamos del coche. La puerta de la casa se abre y un barullo de personas sale alegremente. Jaime toca mi hombro y antes de saludar a nadie sacamos las maletas del coche. Alicia corre hacia los brazos de Eva. Se funden en un abrazo puro y sincero. Mientras me dispongo a coger una maleta siento que alguien se acerca pero no presto atencion. Las manos de esa persona se posan en mis ojos. No se quien puede ser. Un olor embriagador me proporciona la pista que necesitaba.

-¿Pedro?¿Eres tu? -Pronuncio entrecortada.

Las manos se retiran de mi mirada. Me giro y me doy cuenta de mi acierto.

-¿Como lo has adivinado?- Pregunta.

-Axe ¿verdad?.

-Tengo que cambiar de desodorante- Dice riendo.- ¿Podemos hablar a solas?

-Vamos a buscar una habitacion libre.

-Yo se una.

Toma mi mano y me dirije dentro. No da tiempo a que salude a todos mis amigos.

Cada mañana estas aquiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora