Capitulo 5

88 3 6
                                    

Ya es la hora. Mi jornada de trabajo ha terminado. Porfin puedo evadirme de todos los articulos e investigaciones. Saco la lista de la compra, son las ocho y a las 9 cierran los supermercados. Si me doy prisa llegare a tiempo. Dispuesta a abandonar la redaccion noto una mano que acaricia con dulzura mi cintura.

-Me dijiste que tomarias algo conmigo- Dice Pedro invitandome a salir con su mano.

-Tengo que hacer la compra, sino mañana no tendre que comer, ni hoy que cenar- Contesto

-Y si cambio mi proposion- Dice mientras caminamos por la calle.

-¿Como?- Pregunto extrañada

-Te invito a cenar, y mañana a primera hora te acompaño a compar ¿Si?

-Me parcece bien-Digo mientras me adelanto unos pasos- Y ¿donde cenaremos?- Pregunto girandome hacia el.

-La verdad... no lo se.

-No pasa nada, ¿vamos al burguer?

-Venga. Te echo una carrera- Dice mientras se aleja corriendo calle arriba.

Le persigo. Mis pies se tambalean por culpa de los tacones. Tendre suerte si no se rompen.

-¡Pedro espera!

No me escucha. Acelero y logro agarrar su brazo.

-Me alcanzaste pequeña.

(Media hora despues)

-No me robes las patatas- Digo con tono enfadado.

-Enfadada estas guapisima

-Seras tonto, luego me llevaras a casa ¿no?

-No- Dice pedro rotundo- Te llevare al bar de un amigo a tomar algo.

-Ese no era el trato

-No te enfades conmigo- Dice mientras se rie

Acabamos de cenar y agarrada de su mano dejo que me guie por estrechas callejuelas. A lo lejos unas luces de neon nos indican el camino. Unos metros antes de la entrada ya se sienten las vibraciones en el suelo. Entramos y sin soltar mi mano, Pedro, me conduce hasta la barra.

-Te pedire algo dulce, un vodka negro, esta riquisimo- Comenta Pedro.

La musica esta demasiado alta, asi que me acerco a su oido y sintiendo su respiracion junto a mi cuello, le acepto su bebida. Agarra mi mano de nuevo y me acompaña hasta la pista. Coloca sus manos sobre mi cintura y las mias se deslizan sobre su cuello.

Las copas se sucedian. Una tras otra.

Las cinco de la mañana... Segimos bailando...

-¿Nos vamos?-propongo- Ya es tarde.

-¿Piensas ir hasta tu casa a estas horas?- Dice pedro con tono sarcastico.

-No me habia dado cuenta... sera mejor que me ponga en camino.

-No seas tonta yo vivo aqui al lado. No me importa tener compañia esta noche.

-No quiero molestar. Pedire un taxi.

-Me niego- Pronuncia mientras coge mi mano- Ademas hemos bebido mucho.

-Bueno vale. Pero para desayunar quiero churros con chocolate- Digo zanjando el tema.

-Lo prometo.

Ambos caminamos direccion a su casa. Mis pies casi no se separan del suelo. Las copas tomadas esta noche nos han afectado.

En el portal de su casa, Pedro cae sus llaves. Las recoge y entramos a su piso.

-Tengo unas camisetas que te pueden servir de pijama- Me ofrece.

-Gracias. Mañana, vamos a tener una resaca...

Pedro sonrie y sin pronunciar nada mas une sus labios a los mios. No me opongo, no se si es por el acohol o porque realmente lo estaba deseando. Me dejo llevar. Su camiseta cae al suelo,m segundos despues mi vestido le acompaña. Besandonos nos acercamos a su cuarto. Sus manos recorren mi espalda y las mias su escultural torso.

Entramos en su habitacion y nos dejamos llevar por la pasion.

Cada mañana estas aquiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora