Capítulo 8

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Ya llevamos saliendo unas dos semanas y ha sido más divertido de lo que me imagine, entre miradas, risas y notas empezó a ser más divertido y decidimos en vernos hoy en el cine. Algo cliché en todas las películas, novelas y cosas romaticas si lo se, tengo eso de conocimiento, pero no quiero hablar que esto a lo mejor sea un maldito y asqueroso libro que mi yo del futuro escribirá por aburrimiento, pero bueno que puedo decir te entiendo.

Mientras lo espero veo pasar a Durakos junto con sus amadas Durakas a los hijos de mami y papi que solo viene a presumir sus cosas y todas sus mierdas que fueron compradas por sus padres. Miro el reloj y faltan 10 minutos para que llegue, cuando levanto la vista ya está frente a mi con una hermosa y radiante sonrisa. Y le doy un beso en el cachete y empezamos a caminar hasta llegar a donde vender los tickets.

-Dime ¿Qué quieres ver?

-Bueno me gustaría ver esa película, la de la niña sin poder y eso... no me acuerdo como se llam...

-Encanto-me interrumpe y la pide

Ignoro que me interrumpiera y empiezo a mirar todo como si nunca hubiera estado ahí antes y fuera un lugar super nuevo e inigualable. Se acerca me agarra de la mano y nos dirigimos hasta las puertas donde esta la gran pantalla con la película, le da los tickets al hombre fornido frente a nosotros, nos da una sonrisa y nos deja pasar. Entramos y nos sentamos en los últimos asientos de atrás. Algunas parejas se sentaban a nuestros lados otras un poco adelante, pero casi todas juntas.

Carajo solo vinieron a follar no a disfrutar del cine infantil.

Miro a todos y empieza la película.

***

Un rato después se empezaron a oírse algunos sonidos raros, por suerte no eran a mi lado. Dereck apretó mi mano, lo suficiente para saber que estaba nervioso.

***

Más tarde empecé a sentir como los asientos se movían, casi estaba acabandose la película. Cada vez iba más rápido, miro al frente, pero unas ganas de vomitar me entraron tan rápido que salí corriendo de ahí y fui al baño, pero nada salió, al igual que siempre, solo fueron ganas que nunca se quitan. Cuando salgo del baño ahí estaba Dereck con mi bolsito. Me reí levemente y lo agarre.

-¿Qué pasó Sabri?

-No importa-Le sonrió y esa sonrisa es borrada cuando siento el calor de unos labios sobre los míos

-Somos una pareja puedes contarme lo que quieras, no lo tienes que esconder, pero si así lo deseas yo te apoyaré

Sonrió y le doy un casto beso al de los nobles ojos. Agarro su mano y seguimos pasando un gran día. Espero y que no se acabe nunca.

***

Cuando nos despedimos sabía que era algo agridulce lo que vendría a continuación, pero no sabía que mi ego fuera tan mierda

SaturnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora