Una parte de mi mundo

¡MUERETE!

No entiendo por qué, es una locura, eso es lo que es y le busco una cura. No entiendo como los años no lo matan ¡¿Y por qué mis sistemas lo acatan?! Hace tiempo todo eso murió, murió y murió, no hay amor, no hay nada. Sólo recuerdos emanan, y todo eso mi seño frunció.

Es horrible, no se puede volver, hay cosas que de su línea no se pueden mover ¿Acaso tengo permitido ir al pasado? No debo y me muero, fuiste peor que un hombre casado. Tan inalcanzable me parecías, pero sí hubiese tenido esta mente; te daría lo que merecías, pero no fue así, yo estaba demente.

No me atreví... Nunca, por eso te perdí. Debí haber dado ese paso yo, yo, porque te esperé a ti y nunca lo diste. Parecía un baile de no me atrevo, solo un chiste. Es triste, muy triste, dio depresión y da aires que ya viste ¿Mas que queda ya? Para, sal de mi mente, estás muerta ¡¿Y que más da?! Todos muertos, todos, no necesito a nadie, a nadie. Quedan solo versos que la amargura parie.

La condena de tener que seguir viéndote estos años y los que restan, en una carcasa que apesta. Sí estás ahí, pero tampoco estás ahí, no es lo mismo, era un sabor dulce, ahora es puro ají. Alguien te robó el interior y dejó a otra persona en tu cuerpo, por eso te perdí y no hay vuelta atrás. Tú eres un muerto, yo soy un muerto.

¡Que dolor! ¡QUE DOLOR! Sueño con tus ojos y con tu olor, sueño contigo y sueño con nuestras oportunidades, sueño con lo que pudimos ser, sueño con tus signos vitales y con que me vuelvas a ver. No puedo viajar en el tiempo y me hace llorar, no soporto esto, no te soporto ni a ti, ni a mis pensamientos, ni al resto. Nada ¡MUERETE! Yo te maté, y te fallé, no te agarré con la suficiente fuerza, te dejé correr hacia la oscuridad y estás muerta. ¡¿POR QUÉ NO TE ARRASTRÉ HACIA LA LUZ?! Que te consuma a ti la juventud, que a mi me consumes tú.