¡El tsuguko de el amor!

⁰⁶

El examen de admisión para los cazadores de demonios estaba cada vez más cerca, faltaban solo unas semanas y Zenitsu no se sabía ninguna postura del amor.

Pero entonces, Mitsuri y Shinobu se acercaron a él con amabilidad. -Hey, Zenitsu-chan-, dijo Shinobu. -Las poses te están saliendo mal, debes hacerlo igual que Kanroji-aconsejó Shinobu.

Zenitsu asintió y se puso en pose de pelea de nuevo. Había estado entrenando con Mitsuri durante dos años, desde que ella se convirtió en pilar. Gracias a eso, había aprendido cómo estirarse a la perfección e incluso logró imitar la flexibilidad de Mitsuri, lo que le dio más posibilidades de desarrollar las respiraciones del amor.

Después de un tiempo, Mitsuri sugirió descansar y todos se sentaron juntos. Zenitsu fue a buscar agua mientras las lágrimas se acumulaban en sus ojos ámbar. Se sentía frustrado y pensaba que nunca lo lograría.

Pero entonces, Aoi, con emoción, se acercó a Zenitsu. -¡Zenitsu-san!-, exclamó. Zenitsu respondió limpiándose las lágrimas. Se dio cuenta de que no estaba solo y que tenía a personas que creían en él.

La conversación fluía normalmente entre Zenitsu y su Nee-san mientras entrenaban juntos. Pasaron siete horas de intenso entrenamiento, pero para una pilar y su tsuguko, eso no era gran cosa. Sin embargo, también tenían que asegurarse de que Kanao estuviera lista para su examen.

Mientras Mitsuri y Zenitsu descansaban en la finca mariposa, Kanao y Shinobu seguían entrenando hasta altas horas de la madrugada.

-Onee-san, he notado que Kanao no habla conmigo, ni siquiera con Aoi. Siempre que Aoi y yo hacemos cosas juntos, ella no se une hasta que lanza su moneda-

-Ah, Kanao-chan es así. No puede tomar decisiones por sí misma-

A Zenitsu le pareció curiosa la situación de Kanao, pero estaba tan agotado que no pudo hacer mucho más que dormir.

Las semanas pasaron, y el día del examen finalmente llegó. Mitsuri decidió darle a Zenitsu su regalo tan esperado.

-¡Zenitsu! ¡Perdón por haberlo olvidado, pero aquí está, ¡yatta!- Mitsuri mostró el haori estrellado, con pequeñas estrellas y el haori amarillo.

¡Qué dramática y emocionante historia nos has compartido! Mitsuri abrazando a su tsuguko con lágrimas en sus mejillas, expresando un vínculo conmovedor en medio de la angustia.

-¡Por favor, no mueras Zenitsu, confío en ti!- exclamó Mitsuri entre sollozos, revelando su profunda preocupación por su compañero.

Zenitsu, con sus propias lágrimas, sintiendo la pesadez de su partida y el peligro inminente.

El camino, bajo una lluvia intensa, se convirtió en una pesadilla, dejando su cabello hecho un desastre. ¡Qué horror vivido en ese trayecto!

La narrativa avanza hacia la selección final, donde todo se concentra en la valentía de Zenitsu al enfrentar su destino. ¡Qué determinación!

-Oh, de todas mis víctimas, tú eres el más hermoso- gimó el demonio con una sonrisa siniestra, desatando la tensión en el enfrentamiento.

Zenitsu, con toda su determinación, le dijo al demonio -Pues prepárate, porque no seré una víctima, ¡seré quien te derrote!-

El demonio, intentando ser astuto, le preguntó a Zenitsu -Eres tan lindo, ¿no preferirías mejor ser mi esposo?-

Zenitsu no se dejó engañar y respondió con asco-Ja!, ni en tus más siniestros sueños-

"Respiración de el amor"  "Escalofríos del primer amor",

Y luego, los demonios resultaron ser todo un caso, ¡querían cortejar a Zenitsu en lugar de atacarlo!  Parece que ser lindo tiene sus ventajas hasta con los demonios.