El Mayordomo-Enid x Tn

13-Pelea por su corazón

Todo había pasado demasiado deprisa. Sí, de un día para otro, escucharon algo en la entrada del patio donde los alumnos salieron a ver. Cuando Enid, tomada de la mano por su mayordomo bajó a ver, sus ojos se abrieron de par en par pues el hombre lobo al cual había rechazado se encontraba allí mismo. Tn al enterarse supo que algo malo iba a pasar por lo que le pidió a su chica que se quedase detrás de él.

―Tn―dijo éste―he venido a buscarte para desafiarte por el corazón de la loba.

―Nuestras familias han hablado, tú no deberías estar aquí―comentó ella desde su posición y con algo de miedo.

―Un matrimonio no puede romperse así como así y lo sabes, ambos debemos luchar para determinar quien es el que se casará con ella.

―Tiene razón...―susurró Enid, agachó la mirada triste.

―Las normas dicen que al pelear contra los normies, no puedo usar mi transformación en lobo y lo entiendo, sería demasiado fácil―se cruzó de brazos―ahora sal a pelear.

El joven era de la misma estatura que él, pelo negro y largo. Por las pintas se apreciaba claramente que se trataba de un hombre lobo.

―Tn no...―pedía ella viendo como el joven avanzaba, se quitaba la chaqueta y luego el chaleco para a continuación arremangarse.

―De acuerdo, acepto pelear. Pero no será a muerte

―Claro que no, pero no esperes que sea blando contigo

―Lo sé.

Tn realizó unos pequeños estiramientos al igual que éste quien se crujía los nudillos. Enid estaba llorando porque no aguantaba la violencia, y tampoco que Tn se pusiera en riesgo contra un hombre lobo incluso en su forma humana. A pesar de no estar transformado, los hombres lobo tenían una fuerza superior a los normies.

―¿Preparado?―preguntó éste.

―Cuando quieras―respondió Tn.

El hombre lobo estaba emocionado, por fin iba a tener una pelea con él. Todos los alumnos estaban allí plantados, mirando sin decir nada y Miércoles siendo abrazada por su roomie quien lloraba a raudales. Cosa sacó un pañuelo y se lo dio.

―Gracias―dijo en voz baja ella antes de sonarse la nariz.

Tn vio como éste se encaró poniéndose más cerca y tratando de lanzar los primeros golpes. El mayordomo por su parte esquivó con facilidad, le estaba poniendo a prueba. Tn hizo una pequeña llave que lo dejó tirado en el suelo. Enseguida se puso de pie y empezó a usar golpes más rápidos y fuertes.

El chico esquivaba algunos y paraba otros pero a pesar de haber entrenado se notaba que el hombre lobo era un excluido. Éste golpeó el pecho del mayordomo haciendo que se encogiera y trató de rematarlo aprovechando la ventaja cuando Tn lo pateó en el pie haciendo que perdiera el equilibro.

―Te defiendes muy bien―dijo mientras se levantaba del suelo y limpiaba un poco el polvo―nada mal mayordomo, esperaba derrotarte en un par de golpes.

―Lamento decepcionarte―replicó manteniendo la guardia.

Cuando el hombre lobo intentó golpearle de nuevo, Tn tomó en está ocasión  la iniciativa y le pegó un puñetazo en la cara. Lo sujetó del brazo y comenzó a darle una serie de puñetazos al chico que no sabía de donde venían los golpes.

―¡Ánimo Tn!―animaba su novia.

Miércoles disfrutaba del espectáculo viendo como la sangre empezaba a brotar de la nariz del hombre lobo. 

Tn había entrenado mucho para proteger a la persona asignada. Le hacia toda clase de llaves, le golpeaba cuando menos se lo esperaba y sabía donde dar el golpe. El hombre lobo sentía su cuerpo mucho más pesado y le dolía el brazo o las manos al intentar atacar.

―¡Joder!―se quejó éste que no podía ni siquiera acertarle.

El mayordomo le pegó un fuerte puñetazo en la cara que lo mandó volar y cayó al suelo. Tn respiró un poco porque para cada golpe necesitaba usar mucha fuerza porque de lo contrario no habría podido hacerle daño debido a la resistencia de éste. Miércoles sin ser vista por nadie guardó disimuladamente una pistola cargada con balas de plata pues llegó después del resto de alumnos.

―Me rindo...―dijo antes de quedarse tumbado.

Enid corrió emocionada y dando gritos de alegría mientras se acercaba a su chico a quién abrazó con tanta fuerza que lo tiró al suelo. Luego, le dio igual que estuvieran delante del resto de alumnos, comenzó a darle muchos besos en la cara.

―¡Has ganado!―le seguía dando besos hasta que el pobre mayordomo tuvo que separla.

Entonces vieron al hombre lobo acercarse, tenía el semblante serio. Ante la sorpresa de ellos dos y el resto, extendió su mano para estrecharla.

―Has ganado limpiamente, ha sido un placer pelear contra ti―dijo.

Tras haber resuelto el conflicto, el hombre lobo se despidió de todos y regresó a casa. Tn por su parte fue atendido en la enfermería mientras Enid lo miraba con una enorme sonrisa.

Tn recibió la orden de no hacer nada, tenía un par de días libres. Luego, fueron a la habitación donde el chico se tumbó un rato mientras era abrazado por la loba. Ella quería pasar mucho tiempo con él.

―Enid estoy bien

―Lo sé, pero quiero estar así

―Pero...

―Es una orden

―Bueno...

Unos cuantos días pasaron y Enid estaba feliz, aunque también avergonzada porque muchas veces imaginaba como será la boda entre ambos.

Miércoles logró terminar de escribir su novela, algo sangrienta para Enid quien se desmayó con las primeras páginas así que la persona encargada de leerlo fue Tn.

―Un día más―decía Enid―voy a Jerichó con Yoko, ¿me puedes llevar caramelito?.

―Claro―respondió él sonriente.

―¿Podrías no usar esos estúpidos motes delante de mí?―preguntó la gótica―son horribles.

Y así, los días pasaron y Tn estaba ya recuperado. Ayudaba a Enid en todo, los estudios, cosía su ropa, limpiaba y ordenaba la habitación...aunque era diferente ya que la loba estaba muchas veces tumbada mirándolo.

―Enid me pone algo nervioso que me mires así―dijo él.

―Es que...no puedo evitar pensar en la boda―respondió ella.

―Aún queda para eso―comentó.

Entonces fue abrazado por ella por su espalda.

―Tenemos tiempo para los dos...―susurró antes de morderle la oreja.

―Enid...

Ella acarició su pecho.

―Porfa...hace días que no tenemos intimidad...solamente será un ratito pequeño

―Dios...¡Enid!―exclamó al ser agarrado de cierta parte.

―Es una orden

―Bueno...si es una orden...

Ambos se tumbaron en la cama donde empezaron la fogosidad de los besos por parte de ambos...iba a ser una tarde muy amorosa.

Continuará...

El próximo capítulo es el final-Campanas de boda

Espero que les haya gustado.

Un saludo  :D