¿Cómo decirlo? Si les admitía que algo estaba pasando, tendría que admitirlo a sí mismo. Tendría que abordar que hay un problema allí que necesita espacio y tiempo para tratar. Pero era más fácil seguir pensando que no había ningún problema. Porque...
Capítulo 3 I'm Fine parte 2. Créditos a TopNotchGeek, usuario de Ao3, escritor original de la historia.
Este capitulo esta dedicado a @ValenDuque2 que me recordó que debía actualizar esta historia. Se le quiere mucho <3.
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Nunca le pasó nada a Shoto sin que Enji lo supiera.
Se aseguró de controlarlo todas las noches y a primera hora de la mañana. Aunque Shoto rara vez respondía a alguno de los mensajes, siempre eran leídos al menos en media hora.
Pero ahora había seis mensajes que Shoto ni siquiera había visto. Entonces Enji había intentado llamarlo; Shoto nunca esquivó sus llamadas. De vez en cuando colgaba temprano, pero siempre contestaba a menos que diera una razón expresa en el momento en que vio la llamada perdida.
No llegó ningún motivo. Ni uno.
Cualquiera se preocuparía por su hijo, especialmente cuando eras el héroe número uno con un objetivo en la espalda y, por lo tanto, todos los demás miembros de tu familia también estaban en peligro de ser villanos. Pero la escuela lo habría llamado si un villano hubiera atacado. Los medios habrían estado al tanto si otro estudiante hubiera sido secuestrado.
Enji consideró que este podría ser un nuevo tipo de rebelión que Shoto estaba probando, pero Enji estaba bastante seguro de que había abandonado sus rabietas petulantes y ahora estaba aceptando su propósito.
Decidió que, si podía obtener alguna información sobre esto, sería en la escuela de Shoto.
Había llegado inesperadamente. Aunque no pensó que fuera tan inesperado que no enviaran ningún maestro a saludarlo. No se encontró con Eraserhead cuando entró en el edificio del dormitorio de clases de Shoto, ni All Might intentó hacer amigos cuando la presencia de Enji era tan obvia. Extraño.
Por alguna razón, los estudiantes de la clase de Shoto parecían estar evitándolo, desviando la mirada o cambiando drásticamente de dirección cada vez que se acercaban demasiado a él.
Finalmente, el verde – Midoriya – se acercó a él arrastrando los pies, con aspecto manso y patético como siempre.
─¿Eh, señor?─ Su sonrisa era forzada. ─¿A qué le debemos la ple-uh, esta visita?─
Enji le frunció el ceño; este era el chico a quien Shoto le había dicho. Independientemente de las excusas de su hijo, no confiaba en que Shoto no hiciera algo tan infantil y mezquino.
─Estoy preocupado por Shoto─, dijo Enji, manteniendo el nivel de voz para no revelar la ira que se vio obligado a contener; si quisiera que estos niños cooperaran, tendría que actuar en consecuencia. ─No ha estado contestando mis llamadas ni mis mensajes. ¿Está el aquí? ¿Está a salvo?─
Después de todo, Enji no querría que su obra maestra sufriera ningún daño.
─Yo-uh...─ Las manos de Midoriya se juntaron en el dobladillo de su camisa, jugueteando con ella; Definitivamente estaba ocultando algo.
